En este chiringuito el pasado y el presente se encuentran. Porque estas mesas han acogido a personalidades tan relevantes del mundo de la cultura como Josep Pla –imprescindible es su libro Cadaqués publicado en 1980–, Gabriel García Márquez, Jean Nouvel, Victoria de los Ángeles o Marcel Duchamp. También muchos cocineros: los hermanos Adrià, Arzak, los chicos de Compartir o Fina Puigdevall. Y eso sólo puede significar una cosa: que en Boia Nit se come, se bebe y se vive bien. Razón fundamental para formar parte de esta ruta patrocinada por Aperol Spritz, la bebida de aperitivo que está siempre presente en los buenos momentos, y en los buenos recuerdos.
A pie de playa, como manda la ley del chiringuito, se podría afirmar que este local abierto en 1946 es merecedor de formar parte del Catálogo del Patrimonio Cultural Catalán, posicionado como el espacio de tertulia de la sociedad cadaquense. Y de que el listón siga tan alto como el primer día se encarga Manel Vehi, el sucesor del fundador del Bar Boia. Él ha aprendido de los mejores (Ferran Adrià, Albert Adrià, Grant Achatz o José Andrés) y ha crecido bajo la cultura del esfuerzo y del trabajo bien hecho para que la visita a Boia Nit esté a la altura de su ubicación.
Pero no sólo Manel porque todo el equipo que está detrás de la barra de este chiringuito 100% mediterráneo tiene una formación envidiable, algo que les ha llevado a ganar varios premios internacionales de mixología. Con referencias así, uno puede dar por hecho que tomar un Aperol Spritz en la Boia Nit será como beber el cielo.