No sólo de tomate vive el salmorejo, también de fresas y remolacha. Si no te crees que esta combinación pueda dar como resultado uno de los platos más apreciados de nuestro país (y de la época más calurosa del año), prueba a mojar un poco de pan en esta sopa fría que hemos preparado y permítete a ti mismo disfrutar de la fusión de nuevos sabores.
Ingredientes:
- 200g de remolacha.
- 250g de fresas.
- 400g de tomate.
- 60ml de aceite de oliva.
- 1 diente de ajo.
- 80g de miga de pan de barra (día anterior).
- 1 cucharada de sal.
- 1 cucharada sopera de vinagre.
Preparación:
Primero ponemos a cocer la remolacha durante 30 minutos hasta que se ablande.
Lavamos y desinfectamos las fresas y los tomates para cortar ambos ingredientes en trozos pequeños.
También hacemos lo mismo con la remolacha.
Colocamos las fresas, el tomate, la remolacha y el diente de ajo en una licuadora y trituramos hasta que quede una mezcla homogénea. Detenemos la licuadora y añadimos el pan duro, el vinagre y la sal para seguir licuando. Una vez tengamos una mezcla nuevamente homogénea, vamos agregando el aceite poco a poco, con el utensilio en funcionamiento, hasta que obtengamos una emulsión fina.
Metemos la crema en la nevera durante unos minutos para que enfríe y tomamos a continuación.