El nacho es el alimento de la cara bonita mientras que jamás se nos habría ocurrido pensar en las espinacas como pareja de baile de un crujiente nacho pero, ¿quién dijo que ambos alimentos no pueden consumirse al unísono? No querrás otra salsa una vez hayas probado el poder del verde.
Ingredientes:
- 1 paquete de queso de crema.
- 1 lata de espinacas.
- 1 cucharadita de pimienta negra.
- ½ taza de yogur natural.
- ½ cucharadita de jugo de limón.
- sal.
Preparación:
Mezclamos el paquete de queso con la proporción indicada de yogur natural, ayudándonos de una batidora, hasta que la fusión de ambos forme una mezcla homogénea.
A continuación se añaden las espinacas bien escurridas y troceadas; batimos para que se mezclen bien todos los sabores.
En la misma mezcla se agrega la sal, la pimienta negra y el jugo de limón, siempre sin dejar de batir.
Y, finalmente, se tritura toda la mezcla en una batidora para que sea más fácil untar esta salsa en los nachos.