Gastro

¿Qué desayunan (o desayunaban) las estrellas del deporte?

De Muhammad Ali a Cristiano Ronaldo, repasamos los gustos alimentarios de algunas de los atletas más laureados de ayer y de hoy. Porque la comida más importante del día lo es aún más si eres todo un campeón.
Muhammad Ali in Newcastle eating a Stottie cake 1977
Foto: Getty Images

A todos nos ha pasado. Hemos visto las proezas de los grandes deportistas profesionales y hemos pensado: «Pero, ¡¿qué narices desayuna ese chico?!’». Pues a continuación lo vas a descubrir, porque te contamos qué desayunan –o desayunaban en algunos casos– las grandes estrellas del deporte.

Comenzamos con el surfista Kelly Slater, que descubrió la chía, una de las plantas de moda, por un amigo en Hawaii y desde entonces el compuesto de esta semilla y agua de coco con bayas y frutos secos es su esencial cada mañana.

Algo más contundente es el desayuno del velocista Usain Bolt, que empieza el día con unas ‘tortas de Johnny’ (masa hervida con harina, agua y mantequilla) o con el plato caribeño ‘Ackee and saltfish’, pescado especialmente salado con este fruto de la zona.

Sólo hay echar una ojeada al cuerpo mastodóntico del nadador Michael Phelps para intuir que no es de los de ‘un café bebido’ antes de salir de casa… Tres sándwiches de huevos fritos con queso, tomate, lechuga y mayonesa; tres tortitas con pedazos de chocolate; una tortilla de cinco huevos; tres tostadas cubiertas en azúcar y un tazón de avena de maíz. ¡Ah!, y dos tazas –ahora sí– de café.

Tampoco se conrta su ‘colega’ de disciplina deportiva Mireia Belmonte, que asegura que se despierta a las 07:30 y a las 08:00 ya está en la piscina. Desayuna después dado que dice haber comido suficiente el día anterior. Cuando, tras una hora y media en el agua, decide que es hora de desayunar, lo hace con ‘porquerías’, según ella. Magdalenas, zumo, leche con cacao en polvo, queso fresco y mermelada.

Por su parte, el tenista Roger Federer se decanta por zumo, un chupito de vinagre, café, cereales, fruta y gofres con sirope de frambuesa. Todo bajo el sello ‘homemade’.

Y a otra tenista como Ana Ivanovic lo que le pide el cuerpo a esas horas es bien de proteína con una tortilla de claras de huevo con pechuga de pavo y un poco de pan. Aderezado con una taza de café.

¿Y qué come una super-mega estrella como el futbolista Cristiano Ronaldo? Pues la constante de su desayuno es un vaso de leche con cacao en polvo. Luego, o bien lo combina con cereales, fruta, pan tostado, galletas… o bien con algo de bollería. Zumo de naranja: otro imprescindible.

Otros tiempos

Si echamos la vista atrás en busca de deportistas de otras épocas, encontramos a titanes como Michel Jordan. Su entrenador personal, Tim Grover, sabe que saltarse el desayuno es un error. Por eso el que para muchos ha sido el mejor jugador de baloncesto de la historia llegó a desayunar en alguna ocasión hasta espaguetis. Antes de cada partido se dejaba ver por el MJ23 de Nueva York para tomar un menú de filete delmónico, puré de patatas y brécol.

Otra estrella del deporte, que en este caso se apagó hace ya mucho tiempo, es Muhammad Ali. Y aunque la verdad –sinceridad ante todo– no sabemos qué es lo que el boxeador comía todas y cada una de sus mañanas, sí que conocemos lo que desayunó el 31 de octubre de 1974, al día siguiente de noquear a George Foreman en el que se condisera el mejor combate de boxeo de todos los tiempos: doce huevos, dos filetes y un helado. Había mucho que celebrar.