El 25 de noviembre se anunciaban las estrellas Michelin 2106 en Santiago de Compostela. Y qué mejor que repasar algunos de nuestro rincones favoritos de la ciudad. Toma nota porque querrás pasarte por alguno de ellos en tu próxima escapada.
CASA MARCELO
Rúa Hortas, 1
El primero en imponer el menú degustación en su restaurante, miembro fundador del Grupo Nove, capaz de reinventarse y renunciar a una estrella… Marcelo Tejedor tiene más vidas que un gato y ni la salida de Carlos Pérez ha provocado que su casa pierda atractivo. Sentarse en la barra y dejarse guiar con cariño por Martín Vázquez es sinónimo de vivir una fiesta japo-gallega.
Un lugar para disfrutar.
Tomates bombón.
Pedro Roca
Rúa Domingo García Sabell, 1
El de este veterano cocinero puede ser el espacio más elegante de la ciudad, además de contar con servicio y bodega de altura. Pese a ello, a algunos parece que les da pereza visitarlo por ‘clásico’ (manda narices). Peor para ellos, porque sus empanadas, la ternera asada o esos pescados perfectos de punto dan forma a platos impecables, sabrosos y de generoso tamaño.
Mercado de abastos
Rúa Das Ameas, S/N
Merece una visita tan solo por su arquitectura y ambiente, pero una vez allí algo de apetito entra… Destacan los proyectos de Iago Pazos y Marcos Cerqueiro: Abastos 2.0 (taberna) y Abastos Ghalpón (casa de comidas con menú fijo). Para algo aún más informal pero igual de placentero, compra una ración de pulpo en el mercado y tómatelo con un vermut Petroni en el cercano club La Radio.
tafona
Rúa Da Virxe
Da Cerca, 7
Aquí se cocina a cuatro manos, ya que sus responsables son los cocineros Lucía Freitas y Nacho Tierno. Tal vez por eso poseen una versatilidad envidiable que les permite ganar concursos de tapas, servir asequibles menús del día y presentar ambiciosas creaciones capaces de sorprender a los paladares más exquisitos. Y, por si fuera poco, todo con una sonrisa.
A quinta da auga
Paseo Da Amaia, 23
Tampoco descubrimos un secreto (hablamos de un hotel que es miembro de Relais & Châteaux], pero es que todo reconocimiento es poco en este caso. Porque el entorno creado por María Luisa García y su hija Luisa Lorenzo es de los que se recuerdan meses después en la soledad de tu oficina. Y si ya pensamos en aquel masaje en el spa o esa copa en su terraza… ¿Cuándo volvemos?
