Restaurant Brands Europe (RBE), el grupo que gestiona las marcas Burger King, Popeyes y Tim Hortons en España y Portugal, ha anunciado un cambio significativo en su liderazgo. El consejo de administración de la compañía, controlada por Cinven, ha decidido nombrar a Borja Hernández de Alba como nuevo consejero delegado en sustitución de Luis Herault, quien ocupaba el cargo desde enero de 2024. Según un comunicado oficial, Herault deja la empresa por «motivos personales».
Hernández de Alba, quien hasta la fecha desempeñaba el cargo de CEO de RBE en Portugal, cuenta con casi una década de experiencia dentro de la compañía. Su carrera profesional comenzó en el Banco Santander y AT Kearney, y en 2012 se incorporó a Burger King Corporation, donde desempeñó diversos cargos, incluyendo el de director general para el norte de Europa, Rusia, Oriente Medio y África. En 2016 se unió a RBI (anteriormente conocida como Restaurant Brands Iberia) como director general para Burger King España y Portugal, y en 2021 fue promovido a director general de RBI.
El nuevo CEO de RBE también es presidente de Marcas de Restauración, la asociación empresarial que agrupa a más de 170 enseñas del sector de la restauración organizada. En sus declaraciones, Hernández de Alba expresó: «Es un honor para mí continuar desarrollando mi carrera en la que ha sido mi casa durante casi diez años. Asumo esta nueva responsabilidad con el mismo compromiso y entusiasmo con los que he trabajado durante todos estos años, con el firme objetivo de alcanzar los retos que tenemos por delante.»
Una salida inesperada
Luis Herault asumió el cargo de CEO en enero de 2024, sucediendo a Gregorio Jiménez, fundador y consejero delegado del grupo durante más de 30 años. Jiménez pasó a ocupar el puesto de presidente no ejecutivo del consejo. La transición había sido previamente acordada con Cinven tras la adquisición del 57% de la empresa por parte del fondo de inversión en 2021, lo que valoró la compañía en más de 1.200 millones de euros.
Durante su breve mandato, Herault supervisó la expansión del grupo en Italia, el tercer mercado estratégico tras España y Portugal, y manifestó su ambición de seguir ampliando las fronteras del grupo, con el objetivo de convertir a la empresa en el operador de restauración organizada más grande de Europa. Como parte de esta estrategia, la compañía cambió recientemente su denominación, pasando de Restaurant Brands Iberia a Restaurant Brands Europe.
Crecimiento sostenido a pesar de las pérdidas
RBE opera actualmente una red de más de 1.350 restaurantes entre sus tres marcas, de los cuales más de 1.050 son de propiedad directa, mientras que el resto son franquiciados. En el último ejercicio, la compañía alcanzó una facturación de aproximadamente 1.850 millones de euros, lo que representó un aumento del 9%. Los ingresos totales de la empresa crecieron un 12%, alcanzando los 1.250 millones de euros.
A pesar de estos resultados positivos, el grupo ha mantenido un perfil de pérdidas en los últimos años debido a su agresiva estrategia de crecimiento, que ha implicado inversiones de entre 150 y 160 millones de euros anuales para la apertura de cerca de 100 nuevos restaurantes por ejercicio, así como una intensa actividad en la adquisición de franquiciados.