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El nuevo proyecto del chef Nacho Manzano ha abierto sus puertas en Oviedo, ciudad que va camino de convertirse en una de las capitales gastronómicas del país. El restaurante NM se ubica al lado de otro de los proyectos de Manzano, Nastura. El espectacular interiorismo que presenta NM es obra de Hazard Studio, liderado por el diseñador Alfredo Rodríguez, estudio que también firma Nastura. Te contamos todos los detalles a continuación.
A diferencia de Nastura, que abrió hace meses y es un local de casi 2.000 m2 para todos los público, NM es un espacio con vocación clandestina y una capacidad para 20 comensales como máximo. Su intención principal es crear un entorno neutro y orgánico donde la propuesta gastronómica de Nacho Manzano tiene todo el protagonismo. Tal y como comenta el diseñador Alfredo Rodríguez, “el objetivo era crear un espacio privado, lejos del barullo, donde la gente hiciera una introspección al margen de ruidos externos y donde se amplificara el protagonismo de la cocina”.
Una propuesta gastro de temporada
La iluminación es otro punto clave para completar la experiencia gastronómica, ya que ayuda al comensal a sumergirse en este viaje culinario. En cuanto a la propuesta de Manzano, NM cuenta con cuatro menús anuales, donde la iluminación led se adapta al tipo de menú que se está sirviendo. Por ejemplo, en el menú de carne de cacería, el entorno se difumina suavemente de rojo, mientras que en el menú con verduras, ofrece una luz verde suave. Actualmente están sirviendo el Menú Primavera, con una opción corta (90 € sin maridaje) y otra larga (149 € sin maridaje).
Entre las delicias incluidas, hay vainas, jugo de Merluza y Champiñon; crema de Llámpares, Patatas, Berza y Pescado de Roca; o chuletón de Mar (carne roja de Navarra, Varé, Cogollo y Anchoa). Y de postre: leche y Pasto (apio nabo, kéfir y lima).
El ‘no color’, premisa principal de su espectacular interiorismo
La privacidad se consigue gracias a un interiorismo en tonos neutros, con volúmenes y texturas que le dan personalidad. Esta premisa del ‘no color’ se puede apreciar en prácticamente todas las superficies: desde las mesas, la barra o las sillas, hasta la moqueta jaspeada. El espacio de NM es bastante modulable y versátil, compuesto por cuatro meses que se pueden combinar o mover según el grupo de comensales de cada visita. Además, también hay barra, para un máximo de 5 comensales, ubicada muy cerca de la cocina abierta.
El interiorismo se completa con unas paredes y techos en forma de pétalos o escamas que, en su propósito decorativo, evocan formas orgánicas y vivas -como capas de un alimento-. Estos elementos cumplen también dos funciones: los que están tapizados actúan de aislantes acústicos y los que son espejos actúan de dinamizadores, como un canal para ver lo que ocurre en otras partes del espacio. Todo ello da lugar “un entorno poético”, según describe el propio Rodríguez. Sin duda, el restaurante NM acaba de pasar a formar parte de la lista de hotspots gastronómicos de Oviedo.