Su nombre proviene del área más céntrica de Miami, que no sólo da nombre al restaurante sino que su idea también se gestó en él. Sus dueños trabajaban en dos de los mejores hoteles de la ciudad y decidieron adoptar la forma de trabajar de los americanos para traerla a España creando su propio proyecto: un restaurante de cocina mediterránea en un local de vanguardia donde se cuidasen hasta los más mínimos detalles.
Su terraza, fresca y tropical con un diseño de lo más industrial, es el lugar ideal para disfrutar de su carta este verano. Para los más clásicos, las albóndigas caseras de la abuela en salsa con patatinas; para los sibaritas, el sándwich cubano de pulled pork al estilo New Yorker; y para los que se quieren cuidar, cualquiera de sus deliciosas ensaladas. Y no te quedes sin probar sus postres porque su maceta de Oreo no tiene desperdicio.