El Parlamento de Navarra aprobó el lunes una Ley de Residuos histórica; esta pretende prevenir en la generación de residuos y avanzar en el sistema de reutilización de los productos.
El objetivo final es reciclar, pero este no ha llegado por su propio pie, sino que la normativa europea ha sido la encargada de fijar unos limites, los cuales hay que cumplir, intentando pasar del actual 30% de plástico reciclado anual a un 55%, como poco.
Las medidas de esta Ley Foral de Residuos son promover el uso del agua del grifo, prohibir vajillas de plástico, eliminar las cápsulas de café no reciclables y añadir impuestos por residuos (entre muchas otras).
Otras comunidades autónomas, como Andalucía y las Islas Baleares, planean la posible incorporación de estas medidas, pero la ley necesaria para que se dé sigue a la espera de votación.