El uso de la sal en la cocina es indispensable. Muchos platos estarían muy faltos de sabor si no tuvieran sal, por lo que podemos decir que juega un papel importantísimo en el resultado final de la comida. Hay muchas variedades de sal con las que deberías de familiarizarte si te gusta cocinar. Cada una ofrece diferentes posibilidades y cada una es perfecta para un plato diferente. Aquí hay algunos tipos de sal con los que vas a estar trabajando.
Sal de mesa: esta es la más común alrededor del mundo. La encontrarás en saleros y tiene un sabor más ‘salado’ que algunas de las otras. Normalmente esta yodada artificialmente ya que durante el proceso de refinado de esta sal se pierden muchos de los minerales presentes.
Sal Kosher: grande y escamosa, esta sal hace un excelente trabajo en el proceso de kosherización de la carne, en el cual se elimina la sangre residual de las carnes antes de comerlas, tal y como esta prescrito en las leyes dietéticas judías. Puede ser usada en la cocina del día a día también.
Sal de mar: tiene muchos más minerales ya que no es una sal refinada y no pasa por ningún otro tratamiento. Viene directamente del agua del mar y está disponible en fina y gorda.
Sal gorda: un tipo de sal de mar utilizada para sazonar carnes y pescados. Si quieres sal recién molida guarda esta sal en un molinillo. Los bordes irregulares de los cristales y su grosor hacen que esta sal no se derrita fácilmente.
Sel Gris (Sal Gris o Sal Celta): esta es otra forma de sal de mar aunque su precio está en otro rango completamente diferente. Recogida con un método milenario de evaporación solar en las costas de Bretaña en Francia este sazonador está muy buscado en el mundo.
Fleur de sel: recogida en las marismas de sal de Guérande en Bretaña. Esta es también otra sal de elevado precio. Con un nombre que literalmente significa ‘la flor de sal’ esta sal debe ser recogida en el momento preciso para permitir que se formen los cristales en forma de flor. Su textura cristalina se derrite despacio en la boca. Utiliza esta sal como un sazonador en ocasiones especiales.
Sal del Himalaya: esta sal se saca de antiguos depósitos de sal en Pakistán. Es rica en minerales y se dice que es una de las más puras que existen. Su color va desde el blanco hasta el rosa y el rojo. Su precio también supera la media.