Gastro

Del pincho de tortilla a las patatas bravas: la ruta definitiva de tapas en Madrid

El tercer jueves de junio se celebra el Día de la Tapa. Y, por eso, hoy salimos a la calle a tapear por los mejores sitios de Madrid. ¿Te vienes?

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¿Qué haríamos sin nuestras queridas Tapas? Es una de las tradiciones gastro más populares de España y para muchos un ritual sagrado cuando van a cualquier bar. Y, aunque inicialmente el tapeo era algo más informal y para picar algo mientras tomabas una caña o un vino, cada vez es más común compartir diferentes raciones y tapas en numerosos restaurantes. El tercer jueves de junio se celebra el Día Mundial de la Tapa y, como queremos honrar a este clásico que da nombre a nuestra revista, hemos preparado una ruta para probar las tapas más famosas de nuestra gastronomía, visitando algunos de los mejores sitios para ello. ¿Te apuntas a un buen tapeo por Madrid?

Primera parada: un pincho de tortilla de patatas

Es el clásico de los clásicos. En Madrid encontrarás pinchos para todos los gustos: más hechos, menos cuajados, con o sin cebolla… Es difícil hacer sólo una parada, por eso hemos seleccionado tres de los sitios míticos de tortillas de patatas.

Casa Dani

Uno de los hotspots tortilleros de la capital, que lleva más de 30 años proveyendo de tortilla desde el Mercado de la Paz y el resto de sus sucursales. En 2019 ganó el II Campeonato Nacional de Tortillas, conviertiéndose en la mejor tortilla de España.
¿Dónde? En el Mercado de la Paz – Calle Ayala, 28 Madrid

Juana La Loca

Nos vamos hasta el barrio de La Latina para probar otra de las tortillas más populares y consumidas de la capital. En esta taberna llevan más de 20 años elaborando la tortilla de la misma forma: con patatas mona lisa y confitándolas junto a la cebolla. El resultado es un pincho de tortilla espectacular, que hasta el artista Bizarrap se ha rendido ante esta tapa.
¿Dónde? En Plaza Puerta de Moros, 4 (La Latina, Madrid).

La Primera

Es otra de las tortillas más populares. Ubicado en el número uno de la Gran Vía, este lugar se ha convertido en un clásico para desayunar uno de sus pinchos de tortilla. Pertenece al grupo Cañadío (La Maruca, Cañadío…), cuyas tortillas son siempre muy bien recibidas.
¿Dónde? En Gran Vía, 1

Segunda parada: marchando unas croquetas

Santerra

Cuando se habla de croquetas, es inevitable que uno de los primeros sitios que se venga a la mente sea el Santerra. Sus croquetas son de otro mundo y hasta han sido coronadas como la Campeona de Campeones de 2022, en Madrid Fusión. Así que su croqueta artesana de jamón ibérico (3 €) es un must en esta ruta de la tapa. Además, también tenemos su receta, por si te atreves a probarla en casa.
¿Dónde? En Calle General Pardiñas, 56

Casa Julio

En una taberna tan clásica y castiza como esta, sabes antes de entrar que sus tapas van a estar deliciosas. En Casa Julio llevan más de 100 años sirviendo buenas raciones y, en cuestión de croquetas, pocos rivales tienen. En su carta encontrarás las clásicas de jamón, pero también otros sabores como picadillo riojano, queso azul, setas con puerro o morcilla con membrillo.
¿Dónde? En Calle de la Madera, 37

Tercera parada: la insustituible ensaladilla rusa

Bar Manero

Ahora que llega el verano, la ensaladilla puebla las mesas de todos los bares. Es una señora tapa, de las más amadas, y también de las más especiales. A cada uno le suele gustar con un toque diferente, pero la ensaladilla con ventresca de atún de Bar Manero es de elección casi obligatoria.
¿Dónde? En la Calle de Claudio Coello, 3

Arrocería Balear

Aunque su especialidad sean los arroces, este restaurante de Pozuelo se ha hecho con el primer premio en el campeonato de la mejor ensaladilla de Madrid, organizado por ACYRE. Su receta está compuesta por patata monalisa asada (no cocida), atún en aceite de oliva, zanahoria, huevo duro y mayonesa emulsionada con el líquido de los encurtidos, unas anchoas y aceituna Gordal. El toque final son los encurtidos picados coronando el plato.
¿Dónde? En Av. de Europa, 27, 28023 – Pozuelo de Alarcón, Madrid

Cuarta parada: marchando una de bravas

Docamar

Las Bravas son otro de los clásicos que puedes degustar en un montón de sitios. Hemos elegido uno de los de toda la vida, de los llamados bares de barrio. Sus especialidades son las cañas y las patatas bravas. La receta de su inconfundible salsa data de 1963 y está hecha con ingredientes como el pimentón ahumado picante, cayena y otras especias. Hasta la puedes adquirir en el propio bar.
¿Dónde? En la Calle de Alcalá, 337

La Maruca

La Maruca bien podría estar en el apartado de tortilla de patatas, en las croquetas o en la ensaladilla. En este restaurante todas sus tapas están deliciosas y sus patatas bravas no iban a ser menos. Se pochan antes de freírse y se cubren con salsa brava, alioli, entre otras. Además, en el emplatado vienen con cebolla frita espolvoreada, para darle un toque crunchy.
¿Dónde? En la Calle de López de Hoyos, 42 (y más locales)

Los Chicos

Para mucha gente aquí se comen las mejores bravas de Madrid. De hecho, el nombre completo del bar es ‘Los Chicos, fábrica de patatas bravas’. Llevan abiertos desde 1945 y sus patatas siguen siendo un clásico. Fueron pioneros en Madrid, con una receta única y secreta de su salsa que siguen elaborando a día de hoy (que, por cierto, también puedes comprar por separado en sus locales). Tienen tres establecimientos en la capital: el original en Moncloa, pero también en Goya y en Embajadores.
¿Dónde? En la calle de Guzmán el Bueno, 33

Quinta parada: ponme un bocadillo calamares

La Campana

Si hay una tradición cuando paseas por la Plaza Mayor de Madrid, esa es comerte un buen bocata de calamares. En el centro de la ciudad cada vez tienes más opciones (y todas muy buenas), pero el abanderado de esta clásica tapa sigue siendo todavía el bar La Campana. Y sus colas lo corroboran.
¿Dónde? En la Calle de Botoneras, 6

Café de la Plaza

Sin alejarnos de la Plaza Mayor, también podrás degustar otra propuesta de calamares modernizada, pero no por ello menos deliciosa. Es la de Café de la Plaza, en el hotel Pestana Plaza Mayor. Una original propuesta en pan brioche con mahonesa de limón que merece la pena probar.
¿Dónde? En la Calle Imperial 8