En las mesas y sillas de un sótano de Nueva York se guardan muchas historias. Cenas familiares, cumpleaños, salidas con amigos…en total 20 años de recuerdos. Lure Fishbar es un restaurante subterráneo de mariscos y sushi que ha consistido en un pilar en Mercer Street tanto PARA los locales como para estrellas de todos los ámbitos como Cindy Crawford, Chris Rock o Heidi Klum. Es un habitual en la vida del Soho, otro hogar para aquellos que lo frecuentan.
Sin embargo, este restaurante parece acabar las hojas de sus memorias ya que su contrato de arrendamiento vence en 2026. Tras conversaciones entre el dueño del edificio, el coleccionista de arte y multimillonario de Palm Beach Peter Brant, y la marca de lujo Prada, los rumores indican lo peor. Prada, su vecino en Soho, podría estar interesado en ocupar su espacio, siguiendo el ejemplo de otros gigantes de la moda como Louis Vuitton y Armani que han abierto restaurantes en Manhattan, pero en este caso, para abrir un café Prada, Pasticceria Marchesi.
El propietario de Lure, John McDonald, ha declarado que ha recibido poca comunicación sobre el futuro del restaurante. McDonald, quien también es dueño de otros restaurantes en Manhattan (Bowery Meat Company y Smyth Tavern en Tribeca), ha expresado su intención de luchar por mantener Lure en su ubicación actual.
La cocina de Lure está a cargo del talentoso chef Preston Clark y a pesar de que el restaurante paga un alquiler de alrededor de 2 millones de dólares al año por su espacio en el sótano y que siempre ha resultado de gran éxito al ser famoso entre famosos, gracias a su ambiente, selección rotativa de ostras, programa de sushi de clase mundial y bar de mariscos de la mejor calidad, no parece que vaya a haber mucha suerte. De todas formas, McDonald confía en que la comunidad de Soho y los clientes habituales respaldarán su local y la permanencia en su hogar de más de dos décadas.
Muchas más historias, por favor
¿Qué mejor forma hay de contar la historia de un restaurante sino a través de sus comensales?
“He estado pasando tiempo en Soho desde los años 90 y uno de las trad que toda nuestra familia adora es Lure”, dijo Cindy Crawford a The Post. “Sería muy triste ver cómo cierra un lugar que reunió a tantas personas de la moda y otras industrias después de tantos años”. La supermodelo acude a Lure habitualmente para «comer algo» y «ponerse al día» con su hija Kaia Gerber.
Otros habituales son Scott Kidder, Chris Rock, Katie Couric, Michael Ovitz (cofundador de la agencia de talentos CAA de Hollywood), Arianna Huffington, Jeffrey Deitch y Nicole Miller.
Otra supermodelo, Heidi Klum, comparte el mismo sentimiento. «Lure es Soho, ha resistido la prueba del tiempo y es verdaderamente el epicentro de la moda, el arte y el entretenimiento. Perderlo sería un día triste para todos los neoyorquinos». El cineasta Ken Burns y su hija, Lily Burns, una exitosa productora de televisión, son también parte de la familia de Lure y no dudan en confesarse adorados por su ambiente: «Es nuestro submarino amarillo. La comida es fantástica. Pedimos el salmón glaseado con miso y los camarones tempura. Se siente como un hogar fuera de casa», dijo Burns a The Post.
Ante esta situación tan difícil, Mcdonald tiene un plan y ese es que aunque Prada se convierta en dueño del edificio, que «colaboren juntos y así todos salimos ganando». Sin embargo, con o sin una victoria, Lure sabe que todos sus famosos, le respaldarán y le seguirán a cualquier otro sótano de Nueva York.