Existen muchas formas de cocinar un huevo. Que si frito con su puntillita bien hecha y la yema poco cuajada, revueltos y con trocitos de jamón, a modo de tortilla de patata con cebolla… Cada uno tiene sus preferencias, pero luego también hay que tener presentes otros aspectos importantes como lo es el tiempo que queramos echarle a la preparación. Y ahí no hay nada más sencillo que pueda ganar a una olla con agua hirviendo.
Los huevos duros o pasados por agua son el invento más rápido y delicioso del mundo. Nos permite comerlos a cualquier hora del día –lo mismo da zampártelos a la hora del desayuno con unas tostadas que en una ensalada por la noche- y son facilísimos de hacer. Lo único que debes tener en cuenta es el modo en que te gusta comerlos. No es lo mismo dejarlo tres minutos que seis. Y lo vas a poder comprobar en la infografía que el diario estadounidense The Huffigton Post ha elaborado para que nadie tenga dudas a la hora de preparar uno ricos huevos hervidos.
Para poder coincidir con la infografía hay ciertas cosas a tener en cuenta a la hora de elaborar tus huevos pasados por agua: en primer lugar, es importante evitar cocinar más de seis huevos a la vez y que la cacerola; y en segundo lugar, cuando el temporizador se apague añadir inmediatamente una buena cantidad de agua fría para cortar la cocción.
Según el manual del Instituto Culinario Francés, estos serían los tiempos utilizados normalmente para los huevos: poco hechos – 3 minutos; medio hechos – 4 minutos; duros o muy hechos- 10 y 11 minutos.