Haz clic aquí para leer la versión en inglés.
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca ha supuesto un antes y un después en la presidencia de EEUU, marcando su era más radical en la que ha decidido acabar con todo, o al menos, con todo aquello ‘opuesto a sus ideales’ y/o que no esté alineado a su visión de América. Una de sus últimas noticias, no exentas de polémica, ha estado relacionada con su proceso de destitución de más de mil personas nombradas durante el mandato de Joe Biden. ‘Nuestro primer día en la Casa Blanca no ha terminado’, dijo Trump en X.
El chef José Andrés, venerado en todo el mundo por su labor gastronómica y humanitaria a través de su ONG World Central Kitchen, ha sido, para sorpresa de nadie, uno de los primeros afectados por la decisión de Trump; siendo destituido del cargo que ostentaba desde 2022 como Asesor Presidencial en Deportes, Ejercicio y Nutrición.
«José Andrés del Consejo Presidencial de Deportes, Aptitud Física y Nutrición, Mark Milley del Consejo Asesor de Infraestructura Nacional, Brian Hook del Centro Wilson para Académicos y [la ex alcaldesa de Atlanta] Keisha Lance Bottoms del Consejo de Exportación del Presidente: ¡ESTÁN DESPEDIDOS!», escribió Trump en X usando la frase que hizo famosa en su programa televisivo «The Apprentice».
Fue en marzo de 2022 cuando Joe Biden nombró a José Andrés copresidente del Consejo de Deportes, Fitness y Nutrición por ser un ‘innovador cocinero reconocido internacionalmente’. Sin embargo, Trump ha decidido ahora poner fin a ese cargo, entre muchos otros.
Trump vs. José Andrés
Aquellos que hayan seguido la relación controvertida entre Trump y José Andrés, no se habrán sorprendido por la medida que ha decidido llevar a cabo el presidente. En este sentido, el chef español se ha opuesto públicamente a las políticas del republicano, por su ‘odio’ a los inmigrantes, entre otras cosas.
Si nos remontamos al 2015, antes de que Donald Trump asumiese la presidencia, el magnate decidió contratar al cocinero para el restaurante de su hotel de lujo en Washington D.C. Sin embargo, éste acabaría retirando su empresa ThinkFoodGroup de la ecuación tras haber demostrado su odio contra los mexicanos. El multimillonario decidió entonces demandarle, reclamándole una indemnización de 10 millones de dólares. En abril de 2017, meses después de ser investido como el 45º presidente de Estados Unidos, ambos anunciarían que habían resuelto ‘amistosamente’ la disputa.
