La cocinera riojana Lucía Grávalos abre ‘Mentica Gastronómico Madrid’ en la capital, situado en la calle Sagasta, 12. En este restaurante, la chef se ha propuesto conquistar los paladares del público madrileño a través de las bondades e infinitas posibilidades de la huerta riojana.
Y para conseguirlo, sus platos están basados, fundamentalmente, en las verduras de su Calahorra natal, y en la cocina más tradicional y apreciada de esta tierra.
Así, Grávalos da valor a los productos locales y a la gastronomía consiguiendo «una fusión entre la modernidad de una cocina fresca y nueva de sabores sorprendentes con la tradición, muy arraigada a las ollas de su abuela. Quiere transmitir su positividad y amor por la tierra a través de su arte. Y conseguir que quien pruebe sus platos se lleve una gran sensación y viva una experiencia culinaria que reviva cada vez que la recuerde».
Fusión de cocinas en Mentica Madrid
Inmersa ya en la investigación y elaboración de la que será su próxima carta, de la que avanza «será una versión de la cocina que se elaboraba en la Calahorra romana» en Mentica Madrid ya podemos encontrar sus conocidos platos. Entre ellos podemos degustar una exquisita acelga de la yaya, los delicados espárragos braseados de El Navarrico con bacalao y caviar o el impactante cromatismo verde de la huerta.
Tampoco faltarán el ramen y marmitako riojano, su ‘Oído Cocina’, ganador del Delantal de Oro en 2017 y, entre los postres, el ruso de Alfaro un dulce típico riojano que la chef ha versionado hasta obtener un helado de mantequilla tostado y yema de huevo con merengues secos rellenos de yuzu.
Las copas también son protagonistas en Mentica Madrid
En Mentica Madrid, la coctelería va a cobrar una especial relevancia. Y también aquí la verdura será la protagonista. «Hemos apostado por incorporar un fondo de verdura a los cócteles más clásicos y, así, ofrecer innovaciones nunca vistas», explica Grávalos.
Al frente de este reto le vuelve a acompañar el maestro coctelero y sumiller Steven Zuloaga, que se encargará de elaboraciones como el cóctel de pimientos o el cóctel de alcachofa, entre otros muchos de la carta.
Además de estos innovadores cócteles, el vino también tiene un especial protagonismo en este nuevo local. En su carta de vinos podemos encontrar 80 referencias, de las cuales –y haciendo honor a su tierra– el 80 por ciento son vinos de Rioja. «Pero sin descuidar también otros vinos internacionales que no debemos perder de vista», añade Grávalos.
Suma y sigue
En apenas una semana de apertura y «muy buenas sensaciones recogidas», la joven cocinera ya está pensando en el que será su cuarto proyecto, que también espera desarrollar en Madrid, «aunque todavía es pronto para desvelar detalles», añade.
Lucía Grávalos se ha formado entre fogones con estrella, aprendiendo de grandes maestros como Martín Berasategui, Dani García y Álvaro Salazar. Su trayectoria profesional reúne experiencias vividas trabajando en restaurantes de Lasarte, Mallorca, Málaga, Logroño y Calahorra. Su experiencia, muy ligada a la costa y a la pastelería, marca su know-how y conocimientos que, unidos a su imaginación y talento, plasma en sus creaciones.
En menos de un año y pandemia de por medio, Lucía Grávalos ha sido capaz de poner en marcha un restaurante en su ciudad natal: Mentica Gastronómico Calahorra y un servicio con una visión canalla de su cocina en formato delivery que da servicio en toda La Rioja Baja: Mentica By Lu.
El último en añadirse a esta lista de emprendimientos es este Mentica Madrid, al que se ha sumado su hermano, también cocinero, Pablo Grávalos, en lo que es «un sueño hecho realidad».
