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¿Te imaginas descubrir unas patatas fritas de McDonald’s de hace más de sesenta años en tu cuarto de baño? Eso es justo lo que les pasó a Grace y Rob Jones, un matrimonio de Crystal Lake (Illinois) que se encontró un sorprendente ‘botín’ mientras reformaban su casa: un trozo de tela enrollado dentro de la pared del baño con una antigua bolsa de McDonald’s.
“Ambos nos miramos y pensamos: ‘Dios mío, vamos a desvelar un caso sin resolver. ¡Acabamos de descubrir evidencia de la escena del crimen!’”, comentó Gracie a la CNN. “Nos sentimos muy aliviados de haber encontrado la vieja bolsa de McDonald’s”, confesó divertida.
Su asombro fue en aumento cuando abrieron la bolsa, que contenía dos envoltorios de hamburguesas y unas patatas fritas a medio comer con décadas de antigüedad. La pista definitiva venía impresa en aquellos peculiares envoltorios: allí estaba Speedee, la primera mascota de la cadena de comida rápida antes de la creación de Ronald McDonald en 1963. Eso significaba que su insólito hallazgo tenía más de 60 años.
Las patatas más adictivas
“Vimos las patatas fritas y dijimos: ‘Esto es irreal’. ¿Cómo diablos están estas patatas fritas todavía en esta bolsa y cómo se conservan tan bien? Fue una locura”, contó Grace Jones, todavía sorprendida. “Suponemos que quienquiera que construyera la casa probablemente fue a comer a McDonald’s, y la bolsa se cayó allí o la escondieron a propósito”, añadió Rob Jones.
Curiosamente, los Jones descubrieron que uno de los McDonald’s originales de la zona se construyó en su misma calle el mismo año que se construyó su casa: 1959. Es más, la madre de Grace estuvo en la fiesta de inauguración: “Aún es capaz de recordar cuánto costaba la hamburguesa con queso cuando se inauguró y cuánto costaban las patatas fritas”.
En la foto, se puede ver el aspecto que tienen las patatas más adictivas del mundo -dicen que por el saborizante de carne de res que contienen- 60 años después: un poco marrones… pero todavía crujientes. Este curioso hallazgo no es el único que implica a la cadena de comida rápida estadounidense: aquí os contamos la historia del cliente que se encontró 5.000 euros dentro de su pedido.
