Lewis Hamilton, actual piloto de Mercedes y futuro de Ferrari, fue el anfitrión que organizó este soplo de aire fresco, con olor a cocina japonesa, a un fin de semana del final de una larga e intensa temporada. En realidad, consiste en una cena de empresa como cualquier otra en estas fechas, solo que en esta se habla de curvas y motores en vez de cifras o cuestiones más ordinarias. Asistieron todos los nombres de la parrilla, menos el veterano Fernando Alonso, Lance Stroll, Nico Hülkenberg y Haas Kevin Magnussen, exactamente 17 de los mejores conductores del mundo en activo.
«Después de otra larga temporada luchando unos contra otros, siempre es bueno estar juntos» comenta Hamilton en su publicación de Instagram, y más si se disfruta la carta del prestigioso restaurante Zuma Restaurant de Abu Dhabi. Aunque todos de diferentes escuderías, colores en sus trajes y números en sus cascos, disfrutaron de una cena todos juntos, cuya cuenta corrió a cargo de Valtteri Botas, según Pierre Gasly.
El restaurante se encuentra en The Galleria, en la isla de Al Maryah, en el corazón del nuevo y lujoso centro comercial de la capital. Platos japoneses modernos y auténticos, pero no tradicionales, se posicionaron los primeros ante la parrilla ‘robata’ de la mesa.
Acompañados por unas vistas increíbles al mar, los drivers celebraron tanto el final de una intensa temporada como el reconocimiento de Max Verstappen como campeón del mundo, una vez más.
En la fotografía de esta cena a la que acudieron comensales de todo tipo de nacionalidades, se pudieron observar algunas de las relaciones amistosas que más likes han recibido a lo largo de tantos años de compañerismo y competición. Entre ellas observamos especialmente, en el centro de la foto, a los dos inseparables amigos del por entonces equipo de McLaren de 2019 y 2020, el español Carlos Sainz (Ferrari) y el británico Lando Norris (McLaren), al lado del joven Franco Colapinto.
Aunque no todos brindaron por una larga amistad, como resultó con Verstappen y George Russell tras su rifirrafe en el último GP de Qatar, con sanción incluida, en la que saltaron chispas y algún que otro comentario, como el que lanzó Norris en sus redes sociales al confirmar que se sentaron separados.
Este fin de semana se disputa el GP de Abu Dhabi, que consiste en el último circuito de Carlos Sainz vestido de color rojo y reflejos amarillos, ya que su temporada en Ferrari finaliza tras cuatro años, para empezar una nueva etapa en el equipo de Williams Racing. Esperemos que esta cena, aunque con poco «chilly«, le haya dado las fuerzas necesarias para aprovechar estas últimas curvas con el nombre italiano y despedirse por todo lo alto con el lema de Jade de «Smooth Operator».
