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El restaurador Anton Pinskiy y el rapero pro-Kremlin Timati, que ya compraron juntos el negocio de Starbucks en Rusia el año pasado, se hacen ahora con los activos rusos de Domino’s Pizza, tras declararse en quiebra su antiguo propietario, según anuncia Reuters.
En medio de ese escenario hostil en el que todas las empresas occidentales en Rusia han emprendido el éxodo colectivo, vendiendo sus operaciones por cantidades ínfimas de dinero, este dúo adquiere ahora esta franquicia en la que mantendrá sus más de 120 puntos de venta, y sus más de 2.000 empleados.
El dúo explotará los restaurantes con el nombre ‘Domino Pizza‘, que se mantendrá prácticamente inalterado, con la ‘i’ de Domino sustituida por el carácter ruso equivalente и.
Timur Yunusov, conocido bajo el nombre artístico de Timati, es un rapero y empresario que ya posee una gran cadena de hamburgueserías llamada Black Star, y que ha verbalizado en muchas ocasiones su apoyo al Kremlin, incluso a través de una canción en la que apuntaba: ‘Mi mejor amigo es el presidente Putin’.
Esta noticia llegó al mundo nueve días después de que DP Eurasia (DPEU.L), el operador de la marca Domino’s Pizza en Rusia, Turquía, Azerbaiyán y Georgia, dijera que declararía en quiebra su negocio ruso tras renunciar a los intentos de venderlo.
El nuevo Domino’s de este dúo inversor continúa entonces la estela del gobierno, quien aprobó en abril un decreto que permite al Estado hacerse con los activos de empresas de países ‘hostiles’ en represalia por las medidas extranjeras contra empresas rusas, y su consecuente alteración o transformación de los negocios: desde Lego, convirtiéndose en ‘El mundo de los cubos’, hasta Krispy Kreme como ‘Krunchy Dream’, o los establecimientos de McDonald’s bajo el nombre de ‘Vkusno & tochka’, o ‘Sabroso y ya está’.
