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La miel es uno de los productos naturales más beneficiosos para nuestro organismo, debido a todos los nutrientes que contiene. Eso sí, siempre y cuando sea miel 100% natural. Una reciente investigación, encabezada por la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) y el Centro Común de Investigación (CCI), ha revelado que el 46% de las muestras de miel importada -analizadas al azar entre noviembre de 2021 y febrero de 2022- forman parte de un fraude masivo, pues estaba adulterada con jarabes de azúcar elaborados a partir de arroz, trigo o remolacha azucarera.
Se supone que la normativa europea prohíbe añadirle cualquier sustancia. Pero a juzgar por las muestras analizadas, se podría afirmar que casi la mitad de la miel que se importa en Europa es «falsa».
La mayor parte de la miel importada proviene de China
Cualquier adición a la miel está prohibida por la normativa europea. Como el 46% de las muestras analizadas eran fraudulentas, se puede afirmar que una parte importante de la miel que se consume en Europa es falsa. Y Europa es el segundo importador mundial de miel con 175K de miel al año, según informó el periódico Le Monde. En cuanto a la procedencia de la miel que llega a Europa, la mayor parte de esta miel adulterada provendría de China (74%), y en menor medida de Turquía.
El estudio que investigaba la miel también determinaba que «una gran parte de la miel importada de países no pertenecientes a la UE y considerada sospechosa por el CCI de estar adulterada sigue presente y sin ser detectada en el mercado de la UE». Uno de los principales determinantes para saber si se trata de miel 100% o no, es leer meticulosamente el etiquetado y, sobre todo, el precio, ya que esta miel adulterada suele importarse a bajo precio. Otro factor a tener en cuenta es fijarte si la miel que tienes tiende a solidificarse. Porque, aunque sea líquida, la que es pura suele cristalizarse. Asimismo, un truco que puedes llevar a cabo para salir de dudas, es poner una cucharadita de miel en agua. Si se disuelve en ella, no será pura.
Diferentes medios y asociaciones que se han hecho eco de esta problemática, coinciden en que el mercado europeo es un blanco fácil para colar este tipo de productos adulterados. De hecho, según publicó el diario L’essentiel, «de 123 exportadores de miel a Europa, 70 son sospechosos de haber adulterado sus productos, y de 95 importadores europeos controlados, dos tercios están afectados por al menos un lote sospechoso».
No sólo es adulterada con azúcares
La principal adulteración de la miel tiene que ver con la adición fraudulenta de jarabes de azúcar, pero este informe también señalaba la presencia de otros aditivos y colorantes; incluso de una falsificación de información trazable. «La miel contiene azúcares de forma natural y, según la legislación de la UE, debe seguir siendo pura. No puede haber agua ni jarabes de azúcar baratos añadidos artificialmente para aumentar el volumen», explica la OLAF.
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha solicitado al Gobierno, las comunidades autónomas y la Unión Europea que reaccionen «de forma contundente» ante el fraude de las importaciones de miel, exigiendo la «retirada inmediata» de los productos adulterados, según ha informado en un comunicado.
Han pedido que se impongan nuevas medidas de control a las importaciones de miel que se reciben en España, replicando las técnicas de investigación utilizadas para el estudio de la Comisión Europea y creando un Centro Europeo de Referencia para la Miel para proteger del fraude a consumidores y apicultores. Por último, la COAG ha pedido a los consumidores que intenten comprar directamente a los apicultores o a través de canales cortos de comercialización, pues considera que esta «es la mejor garantía de autenticidad y calidad de la miel». Insta a hacer una compra responsable para generar empleo y mayor actividad económica en nuestras zonas rurales. Además, ha puesto a disposición de la gente un listado con decenas de apicultores profesionales de España que ofrecen venta directa.
