Tras más de treinta años, la serie de culto dirigida por David Lynch y Mark Frost, sigue proyectándose en la memoria colectiva y en el videoclub de las nuevas generaciones, tanto por su impactante trama como por su poderosa estética suspendida entre efectos visuales, personajes excéntricos y sueños desconcertantes.
El séquito de devotos de esta producción, que conecta el misterio con el surrealismo y el humor en una misma obra audiovisual, habrá podido observar cómo la comida se presenta como el máximo símbolo de virtud, de hedonismo y alegría en secuencias ambientadas en lugares como el restaurante del ‘Great Northern Hotel‘ o en el clásico ‘Double R Dinner‘.
En este sentido, la obsesión del agente Cooper por la comida o el café podría interpretarse como una apreciación de los placeres sencillos, que incluso ilustró el propio Lynch cuando formó parte del elenco de su propia serie, en el papel de Gordon Cole, devorando grandes porciones de tarta acompañadas de altas dosis de café.
Traspasando la pantalla, veamos cómo el efecto e impacto que ha tenido en la cultura gastronómica se ha manifiestado en la vida real.
De la ficción a la vida real
La comunidad de fans de Twin Peaks, de sus mensajes incomprendidos y enigmas, continúan reivindicando su discurso y narrativa a través del diseño de bares y restaurantes repletos de referencias a la serie, como el bar neoyorquino ‘The Black Lodge‘, que viste sus techos en rojo sangre y descansa sobre las geometrías psicodélicas de uno de los escenarios más icónicos de la historia del cine.
La ciudad ficticia de Twin Peaks y todo el imaginario estético inspiran así restaurantes, bares y cafeterías en todo el mundo, en las que poder servir el café, la tarta de cerezas o el sirope de arce y jamón de Cooper.
De hecho, incluso titulan sus locales con sus frases míticas, como ocurre en la cafetería de Illinois, ‘Damn Fine Coffe’. Mientras tanto, en otra de las dimensiones extendidas de la serie en Copenhague existe ‘Log Lady Cafe‘, llamada así en honor de uno de los personajes más enigmáticos de su universo.
Todos esos establecimientos que rinden homenaje a este extravagante thriller, aspiran a recrear esa sensación misteriosa de su restaurante de carretera ‘Roadhouse‘ o de la cafetería ‘Double R Diner‘; decorados con recuerdos y obras de fans, e interiorismos ambientados en sus míticos escenarios. Los visitantes pueden adentrarse, así, en todos esos lugares encriptados de la serie en la que muchos se quedarían a vivir para siempre.
El tributo continúa materializándose en infinidad de restaurantes, como el ‘Wyckoff Starr‘ de Brooklyn, o el ‘Great Nothern BBQ‘ de Rhode Island, que evoca el escenario creativo y sobrenatural del hotel ‘Great Northern’ de la serie a través de múltiples códigos visuales.
Girando el foco de la escena internacional, podemos ver cómo en la nacional se erigen asimismo ciertos locales inspirados en el clásico de culto como el café-bar ‘Estupenda’ de Madrid, que recrea los sets más representativos de la serie de los noventa, como la cafetería ‘RR’, el bar ‘Bang Bang’ o la ‘Habitación Roja’, en los que poder recrear las icónicas secuencias gastronómicas de la serie.
