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El balance de un gran año junto a 16 estrellas Michelin

Como resultado del deseo de Xiaomi de vincular su tecnología a la excelencia culinaria nació Comer con los Ojos, el primer maridaje fotográfico de la historia. Y es que Xiaomi y la Guía Michelin forman una pareja de ases.

Lo verdaderamente premium son las vivencias y las emociones surgidas de las experiencias inolvidables. Así lo sabe Xiaomi y por eso trabaja sobre su tecnología pionera, que permite unir personas y crear recuerdos, como prueba el modelo Xiaomi 14 Ultra, que cuenta con una cámara Leica de excelentes prestaciones. Así, como una nueva forma de explorar el territorio premium, la marca de telefonía decidió unirse a la alta gastronomía, convirtiéndose en el Partner Oficial de la Guía Michelin para las ediciones 2025 y 2026. Y es que ambos sectores comparten valores del trabajo y de la vida, como la innovación o la exigencia.

En Xiaomi consideran que sentarse a la mesa de los mejores restaurantes del mundo está reservado para aquellos que valoran y comparten la pasión por la excelencia, el trabajo en equipo y la creatividad. Y por ello han confiado en Jesús Sánchez, chef con tres estrellas Michelin en el Cenador de Amós, para que sea él quien muestre los momentos nunca vistos y más especiales de los eventos gastronómicos –así ocurrió durante la última gala Michelin– a modo de Chef Infiltrado.

Pero esta colaboración no se ha quedado ahí, porque el 2024 ha sido el año del maridaje fotográfico, el primero de la historia. Bajo el título Comer con los Ojos, decidieron dar un paso más allá en la alta cocina uniendo la fotografía Leica de sus smartphones, el trabajo de diferentes chefs con estrella Michelin y la visión del fotógrafo Javier Corso que ha capturado el lenguaje visual de esas emociones tras cada plato con un Xiaomi 14 Ultra. El explorador de National Geographic ha recorrido kilómetros para llegar hasta la casa de Begoña Rodrigo en Valencia, José Avillez en Lisboa, Toño Pérez en Cáceres o Jesús Sánchez en Villaverde de Pontones (Cantabria).

En cada caso, la motivación ha sido la misma: Demostrar que “comer con los ojos” no es sólo una expresión de nuestro idioma. Y por eso cada plato se ha maridado con fotografías creadas para ser “degustadas” en la mesa. Para lograrlo ha sido clave la participación de la Universidad Politécnica de Valencia que, de la mano de Purificación García, investigadora de la UPV y cofundadora de Food Design, ha confirmado con su estudio que la experiencia gastronómica mejora al maridar platos con fotografías inspiradas en el mismo.

Pero ¿cómo se crea un maridaje fotográfico? ¿Qué tiene de particular cada episodio de este maridaje? Todo esto lo dejamos para el próximo capítulo.