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“¿Puedes creerlo? Mi viejo Aston Martin, que tengo desde hace 51 años, funciona con excedentes de vino blanco inglés y suero del proceso del queso”, reveló Carlos III en una entrevista a la BBC. Este amante confeso del queso -Camilla Parker-Bowles, la reina regente, habló de los gustos culinarios de su marido en MasterChef Australia- decidió modificar el funcionamiento de su famoso descapotable azul en 2018 para reducir la huella de carbono. Y lo hizo de una forma muy peculiar: usando restos de queso y vino.
Este combustible, según señala The Guardian, es una variable del E85, compuesta en un 85% de bioetanol y en un 15% de gasolina sin plomo. La mezcla del bioetanol, recuerdan, se consigue “utilizando residuos de vino blanco no apto para consumo y suero de la leche procedente de la elaboración del queso”.
La pintoresca solución del Rey Carlos para descarbonizar su Aston Martin ha causado cierta polémica entre los expertos: “No debe confundirse con una solución seria para descarbonizar los vehículos”, destaca al diario inglés Greg Archer, director de la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente en el Reino Unido. “A gran escala, los biocombustibles hacen más daño que bien, impulsando la deforestación y el cambio de uso de la tierra, que empeoran la crisis climática”, explica.
Un ‘sabroso’ combustible
“Huele delicioso mientras conduces”, dice Carlos III sobre su vehículo favorito, el Aston Martin DB6 que utilizaron el príncipe Guillermo y Kate Middleton para salir del Palacio de Buckingham el día de su boda. Pero todo apunta a que el uso del ‘sabroso’ combustible se quedará en una curiosa anécdota.
Según ha indicado a The Guardian el doctor Chris Malins, consultor en política y sostenibilidad de combustibles alternativos, el caso del rey es un caso de “boutique” que esencialmente no es escalable como un modelo específico.
Además de este ingenio para descarbonizar su Aston Martin, el rey Carlos también hace un esfuerzo personal para reducir su propia huella de carbono. “No como carne y pescado dos días a la semana y no como productos lácteos un día a la semana. Si se hiciera más esto, reduciríamos mucho la presión”, afirmó a la BBC.
Si queréis saber más sobre los gustos culinarios de Carlos III y Camila Parker-Bowles, podéis curiosear los ingredientes que hubo -y los que no- en su fiesta de coronación.