La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha trasladado su «respeto absoluto» por los derechos de agricultores y ganaderos que estos días organizan tractoradas en España por la situación del sector primario, pero ha advertido que en esta crisis no se puede «cuestionar la crisis climática».
Agricultores protestan estos días por los altos costes de producción en el sector primario, la competencia desleal de terceros países y también por las demandas en la producción para adaptarse a la lucha contra el cambio climático.
A juicio de la líder de Sumar, la agricultura vive un problema «muy profundo» y «grave» que ha derivado en un malestar «real» en los trabajadores del sector. Como ejemplo de esta situación, la vicepresidenta ha explicado que en comunidades como Cantabria, Asturias y Galicia los ganaderos venden la leche por debajo de su coste, algo que ocurre de forma similar en toda España con otros productos.
«Es una crisis económica muy importante de ganadores y perdedores, nos debemos colocar del lado de la gente trabajadora y con derechos, pero sin cuestionar la emergencia climática», ha enfatizado en los pasillos del Congreso Díaz tras comparecer en la sesión de control.
La vicepresidenta ha remarcado en este sentido que los problemas de la ganadería en España y Europa «no es un conflicto con la crisis climática», sino que son de carácter económico y con los modelos de producción. «Tienen que ser paliados de otra manera, no cuestionando la emergencia climática, que es una evidencia», ha apostillado Díaz.
Además, Yolanda Díaz ha recordado que esta crisis climática es «singular» en España, pues es un país «especialmente vulnerable» al cambio climático.