El consumo de platos preparados en los hogares de España creció un 2,9% en 2023, alcanzando un total de 742.377 toneladas y un consumo per cápita de 16,30 kilogramos al año, según el último informe de la Asociación Española de Fabricantes de Platos Preparados (Asefapre), que agrupa a los principales fabricantes del sector.
En este sentido, la pizza vuelve a ser la preferida por los hogares españoles en el 2023, con el consumo de 132.905 toneladas. Le siguen los platos con base de pasta, con 95.162 toneladas; y cárnicas o productos de pollo, con 70.999 toneladas.
El secretario general de Asefapre ha indicado que el hecho de que los platos preparados ofrezcan una variedad tan amplia permite a los consumidores «llevar una dieta equilibrada de manera fácil y rápida».
Respecto a tipologías de conservación, los platos refrigerados lideran en volumen de venta, alcanzando 343.859 toneladas, lo que supone un 46% del volumen del consumo. Le siguen los congelados, con 302.504 toneladas, representando un 41% del total.
PORTUGAL, PRINCIPAL DESTINO DE LAS EXPORTACIONES
El 18,8% correspondiente a las 50.993 toneladas de platos preparados producidas por las empresas asociadas a Asefapre se destinaron a la exportación, principalmente a Portugal, Francia, Arabia Saudita, Estados Unidos y Países Bajos.
«Los platos preparados españoles resultan muy valorados a nivel internacional, lo que pone de manifiesto que el sector trabaja tanto para adaptarse a las necesidades de los consumidores nacionales como del extranjero», ha explicado Aguilar.
El presidente de Asefapre ha destacado que la industria de platos preparados fomenta la aplicación de prácticas sostenibles como la depuración de las aguas, el empleo de las energías renovables y la eficiencia energética.