Hay quienes la beben a litros y quienes no la toleran (en sentido literal y figurado). Quienes prefieren acompañarla con algún complemento que le dé sabor, quienes la utilizan para cocinar o quienes la prefieren sin lactosa o vegetal. A día de hoy tipos de leche hay para todos los gustos, y por ello este alimento merece un día de celebración.
Desde 2001, todos los 1 de junio se celebra el Día Mundial de la Leche. Este día en el calendario fue fijado por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) con el objetivo de incentivar el consumo de este alimento en todo el mundo.
Fuente de calcio, vitaminas A y D, B12, proteínas y grasa, la leche es uno de los productos más básicos en la cadena alimentaria. Estos son algunos de los falsos mitos que rodean el consumo de este alimento:
Pierde sus propiedades durante el proceso
En los últimos años y cada vez con más frecuencia se realizan estudios para mantener intactos los nutrientes de la leche desde que es ordeñada de la vaca hasta que llega a nuestros hogares.
En el proceso industrial, al calentar la leche se busca eliminar cualquier tipo de contaminación microbiótica, manteniendo intactas las vitaminas, proteínas, grasas, minerales y glúcidos.
Las bebidas vegetales son una alternativa
Al contar con todos los aminoácidos esenciales, la leche de vaca posee un alto valor biológico. De entre todas bebidas vegetales, solo la leche de soja cuenta con estas características. Las bebidas vegetales no poseen el calcio que aporta la leche de vaca y suelen tener azúcares añadidos.
Es mejor la leche sin lactosa
En caso de no ser intolerante a la lactosa, no hay ningún motivo para consumir leche sin lactosa. Cada vez existen más variaciones y más opciones en el tipo de leche. Si eres una persona tolerante, puedes optar por un tipo de leche entera, semidesnatada o desnatada.
Provoca colesterol
Consumir leche entera de manera descontrolada puede provocar una subida en los niveles de colesterol. En ese caso la mejor opción sería consumir leche desnatada. Lo recomendable es tomar tres raciones de leche al día para ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares.
La leche engorda
No es solo que no engorde (si la consumimos de una manera sensata), sino que además posee seroproteínas, lo que ayuda a aumentar la sensación de saciado. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la leche y los productos lácteos son “importantes en la diversificación de la dieta”.
