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La salsa holandesa estaría perfectamente dentro del top 5 de salsas más consumidas en la cocina. A pesar de que su nombre nos lleve a los Países Bajos, se trata de una receta original de la gastronomía francesa. Es muy sencilla de preparar, sólo necesitas tres ingredientes, pero da lugar a un acompañamiento delicioso para tu plato. Eso sí, hace falta práctica para conseguir el resultado perfecto, sobre todo porque al tratarse de una salsa emulsionada, se puede cortar fácilmente. ¿Qué serían de los clásicos huevos Benedict sin esta salsa? También es ideal para servir con pescados, ensaladas o verduras, incluso carnes o patatas. ¡Así que ponte manos a la obra con la receta de salsa holandesa que te mostramos a continuación!
Receta de salsa holandesa original
Ingredientes:
- 200 g de mantequilla (clarificada)
- 4 yemas de huevo
- Zumo de medio limón o una pizca de vino blanco
- Sal y pimienta al gusto
Elaboración:
- Primero funde la mantequilla hasta que la grasa se separe del suero. Quédate con la grasa, ponla en otro bol y déjala que temple.
- Mientras, bate las yemas de los huevos en un bol. Cuando empiecen a montar, añade la grasa de la mantequilla sin dejar de batir, hasta que veas que se forma una crema fina.
- A continuación, agrega el zumo de limón o el vino blanco, junto con la sal y la pimienta y sigue batiendo, intentando que no se corte.
