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El Big Mac es probablemente la hamburguesa más icónica que existe. Uno de los emblemas de McDonald’s se comercializa desde 1967 y hasta se usa como un símbolo del capitalismo estadounidense. Todos tenemos en la retina (y en el paladar) su típico aspecto: una doble hamburguesa con tres panes -llamados patties-, cebolla picada, lechuga, pepinillos y, sobre todo, su inconfundible salsa. Pues ahora la cadena de fast food ha lanzado un comunicado informando de algunos cambios que introducirá en su Big Mac y en otras hamburguesas como la cheesburger. Ya están disponibles en mercados internacionales como Australia, Canadá y Bélgica. En Estados Unidos se podrán probar en los próximos meses, mientras que en España todavía no hay fecha. Te desvelamos en qué consisten estos cambios.
Según ha comunicado el chef Chad Schafer, Senior Directo de Innovación Culinaria de McDonald’s USA, estos cambios «suman una gran diferencia a la hora de hacer nuestras hamburguesas más sabrosas que nunca». Estas mejoras en los Big Macs empezarán usando panes más blandos y mejores. También se incluirá el queso fundido de forma consistente. Además, las hamburguesas estarán mejor selladas. Y aquí el elemento más importante: se añadirá más más salsa Big Mac, que aportará más dulzor ácido a cada bocado de la hamburguesa.
¿Qué te parecen estos cambios? ¿Estás deseando ya que estén disponibles en nuestro país?