Existe un restaurante en pleno centro de Paris que funciona perfectamente como una máquina del tiempo. Aunque esta máquina solo te transporta a una época concreta y especial para Francia: los alocados años 20. Y es que 100 años después de que comenzara una de las etapas más brillantes de la ciudad parisina, el restaurante del Hôtel Rochechouart ha querido regresar de entre los muertos para mostrar a sus huéspedes y comensales una experiencia única.
Qué mejor que un hotel que nació y murió en los años 20 y que gracias a la conservación del espacio y la arquitectura sigue en pie para transportarte a una época especial de Paris. Aunque la culpa de que estemos hablando del Hôtel Rochechouart lo tienen sus actuales dueños, Anouk y Louis Solanetm. Los cofundadores de Orso renovaron el hotel y mantuvieron su joya de la corona: el diseño arquitectónico de los alocados 20.
«La historia de París tiene muchas facetas: revolucionaria y romántica. Y la arquitectura de los edificios traza todos estos siglos de historia y se puede ver desde todos los rincones de la ciudad», explican los Solanetm a Forbes.
Ya sentados en la mesa del restaurante, después de haber grabado varias stories de Instagram, el menú de la casa es igual de especial que la decoración. Una gama de diversos platos que se pueden comer en cualquier momento del año y que representan perfectamente algunas delicias de la época que vio nacer el hotel, como el hígado de ternera al estilo veneciano. Algunos platos inclusos están diseñados bajo la inspiración de los barrios de alrededor del Rochechouart y de las estaciones de tren de la zona.
«El menú pretende ser reconfortante y familiar para los residentes parisinos locales, al mismo tiempo que se esfuerza por ser un símbolo de la cocina burguesa francesa para todos los amantes de la comida tanto en Francia como en el extranjero», explican los Solanetm. Y ya sea comer en el sótano del restaurante, donde se encuentra su pequeña, pero curiosa bodega y un salón donde de vez en cuando se realizan espectáculos al más puro estilo cabaret, o en la propia azotea, que la experiencia es igual de apasionante.
Claro, en una época donde las redes sociales son una fuente de descubrimiento de elementos olvidados por el tiempo y con una Generación Z curiosa de lo vintage, el Hôtel Rochechouart se ha vuelto viral en sitios como TikTok o Instagram.
La ambición por ofrecer más experiencias en el Rochechouart sigue muy vigente en los Solanetm, donde el año pasado modernizaron el restaurante con nuevas alfombras, sofás mullidos y pufs, elegantes cortinas de terciopelo y hasta un especio más amplo para los DJs, artistas y demás espectáculos. “A los parisinos les encanta vivir su vida al máximo: les gusta beber vino en las terrazas, pasear por las orillas del Sena y comer en restaurantes. Como dijo Hemingway: ‘¡París siempre es una fiesta!’”.