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Este nuevo espacio vestido en verde menta, se inspira en la estética de una tienda histórica de refrescos hiper-estilizada de los años 50 que transporta a los visitantes al Corso Vittorio Emanuele II de Milán. Entre paredes y techos texturizados generando contraste con un suelo de baldosas blancas y negras, los sofás y sillones tapizados en terciopelo se sincronizan cromáticamente con el resto de elementos del lugar.
La cafetería Prada de Harrods, que parece evocar el imaginario visual de Wes Anderson, dispone de un gran expositor en la entrada con bollería y un surtido de chocolates, caramelos y otras golosinas de la marca Prada.
El Caffè se convierte entonces en una fusión o colaboración entre la gastronomía y el lujo en la que Prada imprime su identidad y sus códigos de diseño distintivos tanto en el interiorismo como en el mobiliario o la vajilla. Así, la cristalería solapada a mano se sella con el famoso motivo triangular de la marca milanesa.
LUJO REINTERPRETADO
El menú de esta cafetería, situada en la planta baja del centro comercial de lujo, se convierte en una versión moderna de la cocina italiana tradicional, y ofrece desde desayunos, hasta comidas o cenas. En este sentido, dentro de su extensa carta de diseño, destacan una serie de platos como la burrata con calabacín cubierto con una montaña de hierbas, los espaguetis con tomates datterino, stracciatella y albahaca, los risottos con azafrán y parmesano añejo o sus platos de marisco con salmón y cangrejo.
Más allá de la comida, los fashionistas de la gastronomía podrán deleitarse asimismo con desayunos en los que combinar capuchinos y huevos a la florentina, o con cenas con sabrosos pasteles con jamón serrano o pizzetes. Postres como la tarta de chocolate con gelatina de frambuesa o la sacher-torte de albaricoque acaban de poner la guinda a esta experiencia ostentosa que maridar con su extensa carta de cócteles y/o su constelación de vinos italianos.
Prada Caffè estará abierto del 31 de marzo al 7 de enero de 2024.
