Si hay una fecha caótica en el calendario, esa es la época de entretiempo, el paso de los cálidos días de verano al frío intenso. Sólo hay que echar un vistazo a nuestro alrededor para darnos cuenta que ni en los estilismos nos aclaramos… Es fácil, en cuestión de segundos, cruzarse con alguien luciendo modelito veraniego y ataviado con sandalias y acto seguido con otro con jersey y botas. ¡Una locura! Hasta aquí puede resultar hasta divertido pero, este periodo de adaptación del calor al frío deja de tener gracia cuando afecta a nuestra salud, la falta de energía, los resfriados… Toma nota de qué alimentos consumir durante esta época para evitar problemas de salud.
La regla número uno es prevenir y, para eso, necesitamos una despensa y nevera repleta de productos con propiedades beneficiosas para el organismo. En esta época de «ni frío ni calor» los cambios repentinos de tiempo debilitan el cuerpo y su consecuencia más típica son los resfriados.
Cómo reforzar el sistema inmunológico
Para mantener en forma nuestro sistema inmunológico elige alimentos repletos de vitamina C, la cual tiene un papel importante a la hora de reforzar el sistema inmunológico. Los cítricos son un gran aliado. Un buen zumo de naranja o mandarina estimulará tus defensas. Apunta en tu lista de la compra también boniatos y pimientos rojos.
Durante este periodo la hidratación es muy importante, dale un extra a tu cuerpo con alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 y bajo en sales: salmón, nueces, aguacates y por supuesto, mucha agua.
Si notas que ya estás a puntito de sufrir un catarro, entonces, no te olvides de incluir en tu dieta cremas de verduras o caldos calientes para aliviar tu garganta. Toma miel ya que posee un gran poder antiinflamatorio y reserva un espacio para los alimentos probióticos pues contienen ayudan a mantener el equilibrio de la flora bacteriana intestinal y en parte disminuyen los síntomas de un resfriado.