Casi todos los amantes de las series coinciden en que Los Soprano, es una de las series que ha motivado el traspaso de talento del cine a la televisión. La serie de la HBO marcó un antes y un después en el mundo de las series y generó uno de los personajes más complejos y carismáticos de los últimos años: el famoso Tony Soprano.
Los Soprano es una serie llena de matices y particularidades, pero una de las cosas que la hacen especial es el protagonismo que tiene la comida a lo largo de sus seis temporadas. Tony Soprano adora la comida y podemos encontrarle en numerosos capítulos engullendo todo tipo de platos. La forma compulsiva que tiene Tony de comer forma parte de su personalidad y nos permite comprender su estado de ánimo.
En la serie vemos un desfile constante de platos de pasta, pollo cacciatore preparado por Carmela Soprano, cannoli (el clásico postre italiano), embutido, bocadillos de pastrami o la carne que prepara Tony en las famosas barbacoas que organiza en su casa.
La serie refleja de manera fiel la importancia que le dan los italoamericanos a la comida, ya que mantener las recetas de la cocina italiana clásicas es una de las formas que tienen de conservar una parte de su herencia gastronómica y cultural.
Además, uno de los mejores amigos de la infancia del jefe de la mafia de Nueva Jersey es Artie Bucco, chef y dueño del restaurante favorito de Tony: el Vesuvio. El restaurante y Artie juegan un papel fundamental en muchos aspectos de la trama de la serie.
COCINA COMO UN SOPRANO
La conexión entre la familia Soprano y la comida hizo que la HBO, a través de la editorial Warner Books lanzase en el año 2002 el libro The Sopranos Family Cookbook (El libro de cocina de la familia Soprano). El libro recoge las recetas como las habría recopilado el propio Artie Bucco, después de la apertura del Nuevo Vesuvio, que abre sus puertas después del incidente mafioso que sufre el antiguo restaurante en la serie.
Las recetas de Artie son recetas típicas de Avellino, la ciudad de la que provienen originalmente Tony y él en la serie. Avellino es una pequeña ciudad de menos de 60.000 habitantes que se encuentra a 42 kilómetros de Nápoles. El libro contiene 200 recetas características de la cocina italiana y, específicamente, de la cocina napolitana cuyo verdadero autor es Michele Scicolone. La mala noticia es que el libro está únicamente editado en inglés y no parece que vayan a publicar una edición en castellano.
El recetario, más allá de las recetas de cocina italiana, está lleno de referencias a situaciones de la serie y guiños a los personajes principales. Podemos encontrar el ensayo de Antonhy (el hijo de Tony) sobre por qué le gusta la comida, las recomendaciones de Bobby Bacala para grandes comilones o la frase de Paulie Gualtieri: “He oído que los esquimales tienen 50 palabras para describir la nieve. Nosotros tenemos 500 para describir la comida”.
En definitiva, si te quieres sumergir en el mundo de Los Soprano y comer lo mismo que Tony Soprano, tienes dos opciones: sentarte a ver los capítulos de la serie con un bolígrafo y un cuaderno para apuntar todas las recetas o conseguir el libro de recetas de Artie Bucco.
