El Corte Inglés lleva ya muchos años apostando por la gastronomía como uno de sus grandes reclamos, ya sea a través de los productos de su Club del Gourmet o de las selectas propuestas de sus Gourmet experience. Iniciativas tras las que hay muchos nombres propios (chefs, productores, distribuidores…), entre los que se encuentra también el de Guillermo Arcenegui, director de hostelería de la compañía y, por tanto, pieza clave en todo este asunto.
Su última y genial ocurrencia es la de llevar a algunos de sus restaurantes los platos más icónicos de nueve tabernas centenarias: Bodega de la Ardosa, Casa Alberto, Casa Ciriaco, Casa Pedro, La Casa del Abuelo, Lhardy, Malacatín, Posada de La Villa y Taberna Antonio Sánchez. Todos ellos establecimientos legendarios y lugares de peregrinación de turistas tanto nacionales como internacionales que buscan disfrutar de recetas antiguas elaboradas con la misma tradición del primer día.
Los responsables de estos restaurantes y tabernas han trabajado con los cocineros de El Corte Inglés para trasladarles su esencia y sus recetas más emblemáticas. Así, del 9 al 15 de marzo, los habitantes de Valencia, Bilbao, Málaga, La Coruña, Palma de Mallorca, Sevilla, Madrid y Lisboa (Portugal) podrán degustar platos como rabo de toro, callos a la madrileña, pochas estofadas con perdiz, pepitoria de gallina, faisán estofado en salsa de vermú, chipirones encebollados, helado de violeta, ensalada de langosta, arroz con boletus, bacalao confitado, cocido madrileño, caracoles a la madrileña…
Se trata de la primera vez que la Asociación de Restaurantes y Tabernas Centenarios de Madrid se une a El Corte Inglés para llevar sus creaciones más famosas a otras ciudades españolas. Y, por supuesto, esperamos que no sea la última.
