¡Queso a la fuga!
Concretamente, 950 ruedas de queso Cheddar. No por sí solas, pero sí por el hombre de 63 años que ha sido arrestado por ser el autor de este robo de queso de lujo que ha involucrado una cantidad de 362.000 euros (389.000 dólares). Estas indescriptibles 22 toneladas de queso cheddar artesanal fueron malversadas a la lechería Neal’s Yard Dairy de Londres, una de las empresas lácteas más famosas de Gran Bretaña.
¿Cómo lo consiguió? No le hizo falta ningún pasamontañas, simplemente se hizo pasar por distribuidor mayorista de un importante minorista francés. Entre los quesos robados, se encuentran variedades galardonadas como Hafod Welsh Organic Cheddar, Westcombe Cheddar y Pitchfork Cheddar.
Según La Policía Metropolitana de Londres (Scotland Yard), dicho sospechoso fue detenido por falsa representación y manipulación de bienes robados y fue interrogado en la comisaría sur de Londres. Más tarde puesto en libertad bajo fianza. Este suceso ocurrió el pasado 21 de octubre y su investigación está a la espera y pendiente de nuevos hechos y pruebas con las que desarrollar este caso.
Lo que se sabe es que, de momento, el queso se encuentra en paradero desconocido. Y para la mala suerte de esta industria tan unida y cercana, este robo del queso más consumido del mundo, ha afectado a las exportaciones a 20 países diferentes.
Todos, Patrick Holden -dueño de la granja productora Hafod Cheddar-, Trethowan Brothers -quien suministró a dicho sujeto el cheddar Pitchfork- e incluso el conocido chef británico, Jamie Oliver, se han pronunciado y todos coinciden en «que ha sido una traición y todo una catástrofe para el mundo del queso».
Asimismo, Trethowan Brothers ha declarado que Neal’s Yard Dairy les había «pagado por completo (y rápidamente)», a pesar del gran robo.
No es la primera vez que la industria láctea es víctima de los delincuentes. En 2015, la policía italiana detuvo a una banda acusada de robar Parmigiano-Reggiano por valor de unos 875.000 dólares.