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La carne cultivada en laboratorio podría ser el futuro de la alimentación. Un ‘avance’ con el que combatir el cambio climático que hace unos años parecía ser producto de la ciencia ficción; pero que está conformando una nueva realidad valorada cada vez más de manera consciente por la sociedad. Esa aceptación ha llevado así a la industria a seguir investigando de lleno en el desarrollo de una serie de alternativas éticas al consumo cárnico, y al gran impacto que genera su industria en el planeta.
En este sentido, la primera salchicha de cerdo cocinada en un lab se ha llevado a cabo utilizando tecnologías de células madres con el fin de replicar células proteicas y obtener el producto. Ese ha sido el proceso que ha seguido la empresa holandesa Meatable para criar la primera salchicha de cerdo en un laboratorio.
Compuesta por un 28% de grasa de cerdo, este alimento se cultiva a partir de células de un óvulo de cerdo fecundado y se enriquece con proteínas texturizadas de guisantes, garbanzos, soja y trigo. La piel de la salchicha se carameliza y se cuartea, como lo haría una salchicha ‘normal’, y emite supuestamente el mismo aroma que la original; logrando un producto que resulta bastante convincente a simple vista.
