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La guía 50 Top Pizza desveló ayer su nuevo ranking de las mejores cadenas de pizza artesanal del mundo con una gran noticia: Grosso Napoletano se ha convertido en la Mejor cadena de pizza artesanal de 2023. De esta forma, la empresa madrileña asciende a la primera posición, subiendo dos puestos con respecto al año pasado.
La empresa madrileña, que ya cuenta con más de 40 locales en nuestro país, se posiciona así como una de las grandes pizzerías a nivel mundial, sobre todo por los cuatro pilares sobre los que se asienta su filosofía: los hornos de leña de piedra refractaria traídos directamente desde Nápoles, su característica masa, los ingredientes italianos y, por supuesto, en la figura de los pizzaioli, declarados Patrimonio Intangible de la Humanidad por la UNESCO en 2017.
Completando el podio, en segundo lugar ha quedado la cadena italiana Da Michele, nacida en Nápoles y que se ha convertido en una de las pizzerías napolitanas más famosas -el año pasado fue la ganadora-. Mientras que la tercera posición se la ha llevado el Grupo Big Mamma. Aunque sea de origen francés, en España tiene una fuerte y consagrada presencia, gracias a sus restaurantes Bel Mondo y Villa Capri, dos hotspots de la comida italiana en Madrid. Además, pronto abrirá su primer local en Italia, concretamente en Milán.
Otras cadenas españolas en el Top 50
Pero la presencia española no acaba ahí, porque otras cadenas nacionales también se han colado en el Top 50. En el puesto 23 se sitúa este año NAP Neapolitan Authentic Pizza. La marca nacida en Barcelona está certificada por la True Neapolitan Pizza Association y cuenta ya con 13 locales por todo el país y otro en Frankfurt.
Una posición por detrás se ha quedado otra mítica cadena catalana, Can Pizza. Su lema es claro «Respect The Pizza«. Su elaboraciones de tradición napolitana, que destacan por su masa fermentada durante 72 horas, las han convertido en una de las pizzas favoritas.
La última aparición entre las 50 mejores cadenas del mundo ha sido para Garden Pizza. Esta pizzería, que empezó en San Cugat en un antiguo invernadero, se ha consagrado como un referente, gracias a su masa propia artesanal con 72h de fermentación, baja refinación y harina sin aditivos. Cuentan con 5 locales repartidos por Cataluña.