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La comida, más allá de ser una necesidad básica, puede suponer en muchas ocasiones una vía de escape y disfrute. Algo con lo que parece conectar Cillian Murphy, o así lo expresó durante una sesión de preguntas y respuestas de la proyección de Oppenheimer en Los Ángeles.
En medio de esa escena de Q&A, el actor explicó entre risas que, de alguna manera, hizo frente a la huelga de la SAG-AFTRA ‘quedándose en casa y comiendo queso‘.
La intérprete estadounidense Emily Blunt, que también estaba presente en el acto, le preguntó cuándo había dejado de comer queso, a lo que Murphy respondió de manera sarcástica: ‘Ayer’, es decir, diez días después de que terminara oficialmente la huelga. Y es que, debido a la profunda y extensa huelga de actores y actrices en EEUU prolongada hasta el 9 de noviembre, la promoción de la película Oppenheimer se vio paralizada, tras su reciente estreno en verano.
Un momento en el que todo se detuvo, y, tal y como relata Murphy, tuvo que quedarse en casa: ‘Fue muy extraño. En realidad fue Londres. Llegamos a París, luego a Londres y después todo se paró. Así que he estado en casa, comiendo queso’, a lo que después añadió: ‘lo recomiendo’.
