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Moisés Chocrón (Ceuta, 1967) es la cuarta generación al frente de Chocrón Joyeros. Tuvo al mejor maestro posible, su padre, el joyero Carlos Chocrón, de quien aprendió el oficio y la importancia de viajar para empaparse de las tendencias y tecnologías para las joyas que creaba. Desde hace justo dos años, Chocrón pone, junto al chef Hugo Ruiz, a la gastronomía de Ceuta en el mapa desde su restaurante Bugao, en Madrid.
¿Eres puntual?
No sé si decir que soy extremada o asquerosamente puntual, cada uno que decida, pero lo soy. Forma parte del respeto y el civismo que debemos mostrar hacia a los demás.
¿Quién es tu inspiración en el mundo de la joyería y relojería?
En ambos campos hay un gran número de firmas que se han convertido en auténticas leyendas. Pero si tengo que nombrar una figura inspiradora, esa es sin lugar a dudas la de mi padre, verdadera alma mater de Chocrón Joyeros y persona que con su obsesión por la mejora continua ha moldeado a la persona que soy.
Cada vez usamos menos el reloj. ¿Esto se traslada al público de la relojería de lujo?
No estoy de acuerdo con esa afirmación. Los datos dicen que se están vendiendo más relojes que nunca y que la locura desatada en torno a algunas marcas y modelos no tiene parangón. Es posible que el uso que hagamos del mismo sea diferente; hace mucho que dejó de ser un instrumento en el que consultar la hora para convertirse en un complemento estético, un símbolo de estatus o incluso una manera de contarle al mundo cómo eres.
¿Las nuevas generaciones se interesan por la alta relojería y joyería?
Absolutamente. Y sobre todo por todo lo que tiene aroma a exclusivo, a aspiracional, a poseer algo que nadie o casi nadie tiene.
¿De niño también te pintaban relojes a boli en la muñeca?
Bueno, me los pintaba yo o me ponía calcomanías.
¿Tienes un reloj “platónico”?
Más que por platónico, por especial sí destacaría el reloj que hicimos para la Selección Española de Fútbol para conmemorar el título de Campeones del Mundo. También los que hemos hecho para el Real Madrid cuando han ganado la Champions League. Me gustan los relojes discretos, con elegancia y clase.
¿Cuándo conoces a alguien, te fijas en su reloj?
No suelo fijarme demasiado en esas cosas sino en lo que me transmite a nivel general. Aunque eso no quita que haya gente que sepa combinar mejor que otros el estilo de reloj elegido para cada ocasión. De alguna manera, sí dice algo de cada uno.
¿Cómo surge la Fundación Chocrón Macías?
Fue un proyecto impulsado por mi padre para que jóvenes sin recursos o en riesgo de exclusión social tuvieran la posibilidad de aprender el oficio de joyero y labrarse un futuro profesional. Creó un taller escuela en Ceuta y de allí han salido varias promociones de jóvenes que han mejorado sus perspectivas de futuro.
¿Cómo se le ocurre a alguien dedicado a la joyería meterse en el berenjenal que es un restaurante?
Pues la culpa la tiene mi amigo y socio Hugo Ruiz, también nacido en Ceuta. Hugo es un cocinero con un talento increíble, cosa que yo ya había podido comprobar a través de los dos restaurantes que tiene en Ceuta desde hace más de 10 años (un Sol Repsol e incluido en la Guía Michelin). Un día le dejé caer la posibilidad de montar algo en Madrid y aquí estamos.
¿Qué tal el panorama gastronómico en Madrid?
La ciudad está en un momento de efervescencia histórico. En los 38 años que llevo en Madrid no he visto una actividad gastronómica, cultural, económica, deportiva o lúdica tan frenética como la que estamos viviendo. A lo que hay que añadir un clima extraordinario y la diversidad de culturas, opiniones y alternativas que imprimen a la ciudad un colorido difícil de igualar. A nivel gastronómico, el ritmo de nuevas aperturas exige a todos vivir en una permanente exigencia de mejora. Y esa es una gran noticia para el sector.
¿Cuál es la gran joya de la gastronomía ceutí?
A mí en Madrid me cuesta encontrar un pescado con el sabor y el tratamiento que se le da en Ceuta. Seguramente porque allí llega casi vivo a las cocinas y desde siempre hemos sabido darle el punto perfecto, es excepcional.
¿Cuál es la sorpresa que se lleva quien se acerca a la gastronomía de Ceuta por primera vez?
No sólo desde el punto de vista culinario, que ofrece un abanico muy amplio de estilos. Todo el que llega a Ceuta por primera vez se sorprende de la belleza de una ciudad. Los dos mares, la calidad de vida, el clima, la diversidad cultural, su historia, los monumentos que la certifican, etc. Hay un dicho popular: “Cuando alguien viene a Ceuta a vivir viene llorando temiendo lo que se va a encontrar. Y cuando se tiene que marchar, se va llorando por dejar atrás una ciudad que enamora”.
¿Qué tiene de característico la cocina de Ceuta?
La cocina ceutí es muy variada. Es cierto que el producto de mar es predominante y de una calidad excelente, pero la influencia de culturas como la marroquí, hindú o sefardí imprimen un carácter muy peculiar y dibujan de sabores exóticos y especiados muchos de los platos de la cocina de Ceuta.
En Bugao decís que un cóctel no se bebe sino que se besa.
Y la mejor manera de disfrutarlo es en buena compañía y brindando “por la vida”. En Bugao ofrecemos un maridaje que pueda incluir por ejemplo un cóctel fresco y ligero para acompañar una ensalada, otro más potente en boca para una carne o un pescado y algo digestivo y que limpie el paladar para terminar. Además, la creatividad de nuestro bartender no tiene límites.
Un plan gastro que te guste hacer en Ceuta.
Desayuno en Carlis, las mejores tostadas de Ceuta. Comida en Piscolabis, de mi amigo Hugo, mirando al mar. Y cena en el Refectorio de Rafa y José Mari, para degustar el mejor pescado.