El ministro de Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, cree que hace falta un regadío sostenible, pero también que hace falta mejorar el consumo de agua, según ha afirmado en una entrevista en Radio Nacional de España recogida por Europa Press.
Planas ha indicado que en España «hay 3.800.000 hectáreas [de regadío], el 23% de la superficie agraria nacional, pero produce el 65% de los alimentos». Así, ha reivindicado los fondos dedicados para mejorar la eficiencia de este modelo de cultivo y las medidas para utilizar semillas y plantas que requieran de un menor consumo de agua.
El titular de Agricultura cree que el regadío es sostenible, pues «si Israel es capaz […] de llevar a cabo dos cosechas en las condiciones tan difíciles en que lo hace», España también podrá. No obstante, ha hecho énfasis en que «el cambio climático está aquí» y que España se encuentra en una posición geográfica «particularmente vulnerable», por lo que «tenemos que adaptarnos para ser capaces de responder a esa situación».
Respecto al pacto nacional del agua propuesto por el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, el ministro Planas lo ha considerado como «atractivo» a nivel conceptual, pero, a su vez, ha rechazado que se hagan «promesas puramente filosóficas» sin concreción.
A propósito de los precios de los alimentos, Planas ha recordado que mañana sale el dato de IPC alimentario, y se ha mostrado convencido de que «vamos a ver una reducción [del mismo] porque el 95% de los factores son exógenos» y la evolución de los costes de la energía, de los fertilizantes o las materias primas «está siendo positiva».
Por último, Planas ha expresado su confianza en que los aranceles impuestos por los Estados Unidos a la aceituna negra española desaparezcan próximamente por ser «injustos» para los productores nacionales.
PROGRAMA CONTRA LA SEQUÍA
Durante la entrevista, Planas también ha hecho mención a las medidas aprobadas este jueves por el Consejo de Ministros, entre las que se incluyen ayudas directas de Estado para los sectores agrícola y ganadero, que superan los 636 millones de euros, o la subvención de hasta un 70% del coste de las pólizas de seguros por la sequía de los cultivos más comprometidos por la falta de lluvias y las elevadas temperaturas. El impacto económico de todas las medidas adoptadas en el ámbito agrario suma más de 784 millones de euros.
De las ayudas directas, 355 millones de euros serán para los sectores ganaderos cárnico y lechero, 276,7 millones para la agricultura y 5 millones para la apicultura.
En materia fiscal, quedarán exentas del pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) las propiedades de los titulares de explotaciones agrícolas o ganaderas que hayan sufrido, en el ejercicio 2023, una reducción del rendimiento neto de las actividades agrarias de, al menos, un 20% en zonas con limitaciones naturales, según la normativa de la Unión Europea, o de un 30% en las demás.
Según Planas, esta medida afectará a 270.000 agricultores y ganaderos. De esta forma, el Gobierno eleva a unos 2.190 millones de euros las ayudas agrarias y las habilitadas por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en materia de aguas.