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Juanito, el anciano camarero más conocido del mercado de La Boqueria, ha traspasado su icónico bar: el Pinotxo. Joan Bayén (así es como realmente se llama) anunció a finales del año pasado que se jubilaba por motivos de salud tras más de 75 años (tiene 89) al timón del mostrador. Entonces, dejó el negocio en manos de sus sobrinos, que ya llevaban décadas trabajando junto a él. Sin embargo, hace unos días los planes cambiaron: según ha informado Betevé, la televisión municipal de Barcelona, Bayén ha decidido finalmente traspasar su establecimiento a los propietarios del Bar Central (también ubicado en el mercado más famoso de la Ciudad Condal) por una falta de acuerdo familiar.
Al parecer, una disputa entre Juanito y sus sobrinos ha sido el detonante para que el camarero haya vendido el bar. Eso sí, después de que el traspaso haya sido aprobado por el Instituto de Mercados de Barcelona, el nuevo propietario ha explicado que su intención es mantener la esencia del Pinotxo, con «platos de mercado, sin tocar los precios». Lo que no se sabe aún es si se mantendrá el nombre del local.
El bar, que ha apostado (al menos, hasta ahora) por platillos tan tradicionales como el cap i pota, las espinacas con garbanzos o el trinxat, se ha convertido tras muchos años en funcionamiento en punto de encuentro indiscutible para cualquier gastrónomo que se precie. Y Juanito, su artífice, en la leyenda de La Boqueria. Una figura reconocida por su carisma y vitalidad (ataviada siempre, por cierto, con chaleco y pajarita) que ahora dice adiós tras más de siete décadas sirviendo cafés desde las 4 de la madrugada.
