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Economía.- Las ventas de aceite de oliva español se disparan un 48% en China, hasta rozar los 177 millones

Las ventas de aceites de oliva de España en la campaña 2021-2022 en
China crecieron un 10,25% en volumen, hasta alcanzar las 45.840
toneladas, mientras que en valor se dispararon un 48,08%, hasta
rozar los 177 millones de euros, según los datos de las aduanas de China correspondientes a las importaciones en los primeros nueve meses de 2022, analizados por la Interprofesional del Aceite de Oliva Español.

El presidente de la interprofesional, Pedro Barato, se ha congratulado de los datos registrados en el país asiático. «En la pasada campaña exportamos al gigante asiático casi 46.000 toneladas de aceites de oliva, un 10,25% más en la campaña anterior. Para que nos hagamos una idea precisa de lo que esa cifra significa, nuestro más inmediato competidor exportó 2.830 toneladas, 16 veces menos», ha explicado.

En concreto, este avance en las ventas ha permitido a China situarse este año como el segundo comprador de aceite español fuera de Europa, por detrás solo de Estados Unidos. Además, los chinos se alzan al quinto puesto de los mejores clientes en el mundo de aceite nacional, superando a Japón y Reino Unido, que tradicionalmente se disputaban ese puesto hasta el pasado ejercicio.

Barato ha destacado que estos resultados son fruto del trabajo que llevan realizando las empresas españolas en ese mercado, desde 2009 con el apoyo de la Interprofesional del Aceite de Oliva Español.

Así, el pasado domingo, coincidiendo con la celebración del Año Nuevo Chino, culminó la primera fase de la campaña de promoción que se lanzó hace ahora cuatro meses. «El eslogan de la nueva campaña en China es muy sencillo: ‘Aceites de Oliva de España. La Nueva Moda’. Esperamos que esta campaña de sus frutos. Estamos convencidos que China será un país de futuro y de moda para los aceites de oliva de España», ha recalcado Barato.

La interprofesional ha dado a conocer el aceite español con acciones como las implementaciones realizadas en las fachadas de algunos de los rascacielos más emblemáticas de Pekín (Wangfujing y Lafayette) y de Shanghái (Puerto Global, White Magnolia Plaza o el Metro City). Además, destaca la proyección del spot sobre las Global Harbour Towers de la capital económica del país, dos torres gemelas de casi 250 metros de altura.