Picos, colines, regañás, quelys, grissini… Da igual el nombre, el pan es pan y a todo el mundo le gusta. Algunos seréis de los normales, otros de los integrales o de esos que vienen en una bolsita con semillas de sésamo mezcladas con semillas de amapolas, pipas y 12 tipos de cereales añadidos. Pero la cuestión aquí es saber hacerlos en casa con distintos ingredientes que te abran un mundo de posibilidades a la hora del aperitivo o simplemente para sustituir la barra de pan que ayer noche terminaste.
Hoy, y dado que tenemos excedente de cítricos en casa, hemos optado por una versión a la naranja que nos ha enseñado a preparar la editorial Lunwerg y que esperamos que os guste.
Ingredientes:
90 ml de zumo de naranja calentado
1 pizca de hebras de azafrán picadas
10 g de levadura de panadero
200 ml, aproximadamente, de agua templada
450 g de harina (añadir un poco más como suplemento)
1 cucharadita de sal
Cáscara rallada de naranja
Aceite vegetal
Modo de preparación:
Mezclar el zumo de naranja y el azafrán en un bol y reservar. En otro bol, poner la levadura y el agua templada y dejar reposar durante 5 minutos. Mezclar la harina, la sal y la cáscara de naranja en una ensaladera e incorporar las mezclas con levadura y con azafrán. Formar una masa, ponerla en una superficie enharinada y amasar 10 minutos.
En una superficie de trabajo aceitada, estirar la masa, doblarla en dos y de nuevo en dos, y formar una bola. Poner de nuevo la masa en la ensaladera aceitada, tapas y dejar reposar 2 horas.
Precalentar el horno a 200 °C, recubrir 2 placas de horno con papel vegetal y enharinar una tabla de cortar.
Eliminar el aire de la masa con el puño, ponerla en la tabla de cortar y extenderla formando un rectángulo de 5 mm de grosor. Cortarla en tiras de 2 cm de ancho y enrollarlas con cuidado en forma de bolígrafo. Ponerla en las placas de horno preparadas, untarlas con aceite y dejar reposar 20 minutos.
Hornear 20 minutos y dejar reposar en una rejilla.