Los polvorones vuelven al ataque. Y los turrones, los mazapanes y el panettone. Temes las tardes en casa tirado en el sofá cual boa constrictor y sin poder salir de casa para adelantar encargos navideños. Tranquilo, no estás solo. Nosotros queremos ayudarte a controlar (aunque sea un poco) tus próximas comidas y cenas. Bueno, al menos aquellas que nada tengan que ver con celebrar la llegada de la Navidad, que ya sabemos que en esas no vas a poder controlarte.
Controlarse no significa dejar de comer. Y esto es así. Aunque muchos decidan eliminar los desayunos o alguna cena para compensar, están muy equivocados. La clave está en el equilibrio. Ahora bien, para compensar el posible desajuste que provocan esas copas de champagne de más o esas mariscadas, seleccionamos varios alimentos estrella que te ayudarán a compensar los excesos de dulces navideños. Toma nota.
Sola, en zumo, acompañando a un pescado en forma de salsa… La piña es una de las frutas más diuréticas que podrás encontrar en el supermercado. Además, te ayudará a frenar ese posible resfriado tan típico de las navidades. Si eres más de papaya que de piña, tranquilo. Este es otro alimento rico en vitamina C y con gran poder para desintoxicar el organismo.
Un buen plato de lombarda con trozos de manzana y piñones es perfecto para compensar las comidas o cenas copiosas.
Las sardinas o los boquerones en vinagre para el aperitivo son perfectos ya que no contienen casi grasas. Ricos en vitaminas B3 y B6 son una fuente de Omega 3 por lo que se recomiendan a aquellas personas que puedan padecer algún tipo de problema circulatorio. Ayudan a regulan el colesterol y actúan como quema grasas.
Sardinillas en aceite de oliva (Sardina pilchardus), de Real Conserva Española (6,35€).
El requesón es otro de los productos que deberías sustituir por otro tipo de queso como el fresco, por ejemplo, que contienen el doble de grasa. Contiene más calcio que la propia leche y es rico en proteínas. Ideal para acompañar un plato o como postre con un poquito de miel.