Aunque no seas aficionado a los puros (lo que os perdéis, amigos), es imposible no maravillarse ante esta elegante pieza creada por la artesana francesa Lison de Caunes, de cuya maestría ya disfrutaron en Hermès o Guerlain. Un trabajo que recupera el arte de la marquetería de paja, tan laborioso como exquisito en su resultado, y del que solo existen diez unidades disponibles para cada una de las tres series que conforman la colección, cuya intención es mostrar la evolución de una hoja de tabaco. Las dos iniciales ya están disponibles –aquí puedes ver la primera, que representa el momento de la recogida– y en diciembre saldrá a la venta la última de ellas (davidoff.com).
Paillon de Davidoff, más que un humidor
