Ya llevamos cinco años disfrutando de la vida y pensamos seguir haciéndolo
muchísimo tiempo más. Por eso hemos creado una lista de 50 razones que nos van a ayudar a conseguirlo y que no dejemos dejar de hacer.
1. No dejar nada en el plato
La lucha contra el desperdicio de alimentos es uno de los grandes retos de futuro. Apps como Too Good to Go aportan su granito de arena, pero esto es cosa de todos: desde el chef estrella a cada uno de nosotros.
2. Los jefes de sala
El servicio en la sala siempre ha sido muy importante. Desde el jefe de sala a los camareros, ellos son nuestro contacto con la cocina. Pero de un tiempo a esta parte están ganándose el reconocimiento que se merecen, hasta el punto de que en ocasiones, a la hora de elegir un restaurante, pesa más la calidad del servicio que su cocina. Ellos son, en adelante, las nuevas estrellas del universo ‘foodie’.
3. Cultura cervecera
Una cerveza es mucho más que lo te ponen en un vaso: ahora somos más exigentes y queremos saber qué cantidad de lúpulo tiene, de dónde proceden o quiénes son los que las elaboran. Desde el movimiento craft a las marcas generalistas, todos se esfuerzan por innovar, diversificar y ofrecer cosas distintas. ¡Por fin!
4. El km 0
Si ese tomate no crece en un huerto local, si esa mermelada no es artesanal, si esa ternera no se alimenta de la misma hierba que pisamos… no nos sabe igual. Así de claro. Que ya somos mayorcitos…
5. La música
No podemos vivir sin música, ¿cómo demonios íbamos entonces a cocinar sin ella? Plataformas como Spotify y sus listas son uno de los ingredientes más importantes de nuestra despensa.
6. El gurú
En la gastronomía no mandan ni Juan Carlos ni Felipe… sino Ferran Adrià. Con él –y unos pocos más– comenzó hace años esta bendita locura, y con él –y elBullifoundation– seguirá muchos más.
7. La moda abre su apetito
Ya sea por los restaurantes que abren las grandes casa de moda, por los estampados de alimentos o por la presencia de comida en las campañas de firmas como Gucci, la gastronomía jamás había sido tan cool.
8. Los insectos
La entomofagia es un filón proteínico por explotar más allá del exotismo de los viajes de aventura. Además, señores, hay que probar de todo en esta vida.
9. Ñam ÑAM TV
Nuestro conocimiento se alimenta del aluvión de series y documentales gastro que llegan a la pantalla de un tiempo a esta parte. Gracias Netflix y compañía.
10. La educación
Antes, el oficio de cocinero se aprendía sobre la marcha, trabajando desde edades indecentes en cualquier tugurio. Ahora, por suerte, existen escuelas de cocina como Le Cordon Bleu que auguran un excelente porvenir a nuestra hostelería.
11. Los nuevos libros de cocina
Que levante la mano quien no haya preparado alguna de las 1.080 recetas de Simone Ortega… Hoy, sin embargo, las editoriales han afinado sus gustos, sus diseños y han sofisticado hasta el infinito sus propuestas para elevar nuestra cultura gastronómica.
12. La marca españa
De la paella o la tortilla de patata a nuestros chefs… ¡Somos grandes! Y el mundo entero lo sabe.
13. El arte
Si hay una forma de expresión que nos conecta con el pasado y con el futuro es el arte. El pictórico, desde luego, pero también el que refleja la artesanía de productos tan propios y exquisitos como los que elabora Cinco Jotas en Jabugo. De la esmerada atención al detalle del costumbrismo a la evocación onírica del surrealismo, pasando por arte puro de esta marca de productos de bellota 100% ibéricos, el talento español ha conseguido exportar un producto único e inconfundible al mundo entero. Inspirado en todo ello, el artista Tito Merello ha recreado ‘El Jardín del Edén de Cinco Jotas’ en esta exclusiva ilustración. Disfrútala con un plato de jamón de bellota 100% ibérico en www.cincojotas.es/eljardindeleden
14. La sostenibilidad
La gastronomía (y el planeta entero) será sostenible o no será. Lugares como el restaurante MO de Movimiento, en Madrid, son un ejemplo a seguir. Lo que propone esta establecimiento, que está causando furor en la capital desde que abriera sus puertas el pasado verano, es una nueva mirada al ocio urbano que apuesta por la inclusión y la sostenibilidad para crear valor y hacer posible un consumo más consciente. Y lo hace a través de una cuidadosa selección de materias primas y productos artesanales, ecológicos y de calidad, con los que –ademas de contentar nuestro paladar– da visibilidad al esfuerzo y compromiso de pequeños productores españoles. Todo un referente.
15. El Aguacate
Posiblemente sea el alimento más omnipresente de los últimos años (dentro y fuera de Instagram). No existe brunch o plato saludable que no incluya este ingredinte. Incluso ya existen establecimientos especializados en él, como la cadena The Avocado Show, que acaba de llegar a Madrid. Y aunque lo cierto es que en ocasiones hemos llegado a renegar de esta fruta por pura saturación, en realidad no podemos negar la evidencia: a nosotros también nos encanta.
16. Dos mejor que uno
La gastronomía y el arte siempre han hecho buenas migas, desde ‘La última cena’ de Leonardo da Vinci a las ‘Latas de sopa Campbell’ de Andy Warhol. Y es un gusto cuando las marcas se lo curran y lanzan ediciones especiales en colaboración con artistas o diseñadores. Los ejemplos son infinitos… pero una de las últimas y más acertadas es ésta del agua Perrier y el japonés Takashi Murakami. Comemos (y bebemos) con los ojos.
17. El reciclaje
Aunque lo del contenedor naranja y el contenedor amarillo parece que –ya era hora– está asimilado por todos, aún tenemos muchísimo trabajo por hacer… Y las marcas, también. Por eso más vale que hagan caso a las recomendaciones de compañías sin ánimo de lucro como Ecoembes, que además del reciclaje en sí, se encargan del ‘ecodiseño’ de envases.
18. Sherry revolution
O, lo que es lo mismo, el resurgir de los jereces, gracias a productores y enólogos valientes que se empeñan en cuerpo y alma en convencernos de que sus vinos son mucho más que un aperitivo.
19. Los ‘foodtrotters’
Viajar con una hoja de ruta gastronómica no sólo apoya el turismo del que vivimos, sino que ayuda a la hostelería, abre nuestras mentes y nuestros paladares.
20. 1.001 experiencias
Está claro que esto no va (sólo) de comer, sino de vivir, sentir, compartir y hasta de vestirse. Por eso propuestas tan originales como la de Take a Restaurant, que convierte el salón de tu casa en un restaurante, nos parecen tan geniales. No todo estaba inventado.
21. La huerta al lado
Cada vez más restaurantes tienen su propio huerto y cada vez más gente decide ampliar su despensa con macetas en casa. ¡Viva la revolución verde!
22. El big data
Lo que comes, lo que lees, dónde cenas y hasta dónde compras deja un registro al que ningún analista puede resistirse. Nuestro Gran Hermano también se ha vuelto ‘foodie’.
23. Instafoodies
Desde hace unos años, confesémoslo, usamos más la cámara de nuestro ‘smartphone’ que los cubiertos. Y puestos a elegir un dispositivo que esté a la altura de tus platos, el nuevo Realme 7 Pro te lo pone fácil gracias, entre otras cosas, a su cuádruple cámara trasera.
24. Lo casual
Ya lo dice Dani García: “La alta cocina debe ser más casual y cercana, si no desaparecerá”. No sabemos si es para tanto o no, pero que los grandes chefs ofrezcan propuestas más relajadas y asequibles nos parece fetén.
25. El legado
Pocas marcas han tenido un recorrido histórico tan longevo y memorable como Anís del Mono. Este año, en su 150 aniversario, este licor elaborado en Badalona y envasado en su inconfundible botella diamantada, con ese mono de rostro ‘darwiniano’,el nombre de su fundador –Vicente Bosch– y hasta el error ortográfico original en el ‘destillería’ de su etiqueta… sigue siendo tan inspirador como el anís de su interior. Un legado que mantiene vivo el espíritu mediterráneo de la firma y del que esperamos que cumpla unos cuantos siglos más. Aunque sea para tocar la botella en nuestras reuniones familiares. (anisdelmono.es IG @anis_del_mono FB @anisdelmono)
26. El orden
Cualquier bocado (y la vida en general) sabe mejor cuando estamos rodeados de un entorno que nos gusta. Por eso en la actualidad los restaurantes y bares se esmeran tanto en su interiorismo como en la elección de sus materias primas. Lo mismo sucede con todos nosotros que, cada vez más gourmets y sibaritas, hacemos lo propio en nuestros hogares. Y si hay una compañía que ha cambiado las reglas del juego es Ikea. La marca ha democratizado la decoración con esos muebles de nombres imposibles de pronunciar –y no menos fáciles de montar–, pero que hacen que nuestra casa luzca mejor que nunca.
27. Yo, robot
Usar un robot de cocina (como este TM6 de Thermomix) ya no supone hacer ‘trampas’, sino una herramienta de trabajo que ahorra tiempo, ideas y esfuerzos. Y por algo los usan los grandes chefs…
28. Masterchef
Posiblemente ningún programa haya hecho tanto por la popularización de la cocina desde ‘Con las manos en la masa’ en los años ochenta. Muy fans.
29. El delivery
Ya existía antes, pero ha sido ahora cuando ha pegado el pelotazo. El coronavirus se irá algún día, pero el delivery ha llegado a nuestras vidas (y hogares) para quedarse, gracias a Glovo (imagen), Deliveroo, Just Eat…
30. ¿Bio, eco, orgánico?
¿Cuántas veces te has llevado a casa productos con etiquetas que ni tú mismo eres capaz de identificar? Llegará el día en que las autoridades se pongan de acuerdo en cada una de las certificaciones, pero resumidamente y por si aún no te has enterado, lo ‘Bio’ se corresponde a aquellos productos que no han sido alterados genéticamente; lo ‘Eco’, a productos para los que no se ha empleado pesticidas, hormonas, fertilizantes o antibióticos; y lo orgánico… bueno, orgánico es todo…
31. Las algas
Las algas serán cada vez más importantes para la seguridad alimentaria mundial y, en un país de costas, tenemos un huerto marino infinito que nos nutre de vitaminas, minerales, antioxidantes y proteínas, como las que provee la empresa gallega Porto Muiños.
32. Los bartenders
Gracias a ellos escapamos del monopolio del ron o el whisky con cola. Eternamente agradecidos.
33. El 360o
La comunicación gastronómica también se redondea, porque no sólo hay que hacerlo bien, sino contarlo bien.
34. Los gamers
La comida siempre ha estado presente en los videojuegos (desde Pac-Man a Súper Mario Bros), pero ahora gana protagonismo con proyectos como el de Diego Gallegos, chef del restaurante Sollo de Fuengirola, quien junto con la Escuela Superior de Videojuegos y Arte Digital de Málaga, está desarrollando uno para introducir la gastronomía en este sector de ocio y llevar la alimentación sana a los más jóvenes.
35. La masa madre
Y nosotros que pensábamos que comíamos pan de verdad antes de que resurgieran las panaderías gourmet, las de verdad… Pobres ilusos.
36. No cocinar
Últimamente los platos preparados de algunos supermercados pasan el examen (y con nota).
37. La bodega en casa
¿Acaso hay algo mejor que llegar de la oficina, quitarse los zapatos y servirse una copa de vino? ¿Acaso hay un invento más importante que el Coravin?
38. El enoturismo
Cada vez más bodegas nos abren sus puertas y muchas además se han puesto las pilas para ofrecer más que catas y paseos por los viñedos. Y eso se agradece.
39. La investigación
La asignatura pendiente de España (también en la hostelería…). Menos mal que existen instituciones como la Fundación Alícia, dedicada a la innovación tecnológica en la cocina y a la mejora de los hábitos alimentarios. ¡Bravo por ellos!
40. La solidaridad
Nuestros chefs –con José Andrés a la cabeza– han demostrado que sólo hay una cosa que saben hacer tan bien como cocinar: ayudar en tiempos difíciles. Todo un orgullo ‘internacional’.
41. El espacio
La cocina se ha convertido en los últimos años en un espacio en constante evolución, donde se materializa toda la tecnología de vanguardia con los materiales más puros. Este año, Cosentino ha presentado ‘Liquid’, una nueva paleta de colores diseñada por el estudio londinense Patternity para Dekton®, la vanguardista superficie ultracompacta de gran formato. Compuesta por Liquid Sky, Liquid Shell y Liquid Embers, esta colección visualiza y materializa el poder del elemento líquido al ofrecer la oportunidad de incorporar sus torbellinos, torrentes y flujos en los espacios que habitamos día a día. Una nueva concepción cromática que pone de relieve la unión entre la tecnología y el diseño, la vanguardia y los elementos. Más en cosentino.com
42. Los mercados
Parecían casi condenados a extinguirse por la proliferación de las grandes superficies con sus horarios infinitos y sus precios en caída libre, pero los mercados de barrio han sabido reinventarse. Han puesto en valor sus numerosas cualidades y en muchos casos ofrecen más que la posibilidad de hacer la compra. Se han convertido en espacios de reunión donde comer, beber, charlar e incluso escuchar música en directo. Intenta hacer lo mismo en un Mercadona y nos lo cuentas…
43. La cocina, el nuevo salón
Pasamos más tiempo en la cocina que en el sofá, por eso cada vez le damos más importancia. Y marcas como Smeg y sus irresistibles productos nos lo ponen fácil.
44. El pícnic
Entre comer en un restaurante y en casa hay una maravillosa alternativa: hacerlo al aire libre. Recuperemos los parques (y las cestas y los manteles de cuadros).
45. La tecnología
Porque, bien usada, es genial. Sirve para conectar personas e incluso a éstas con restaurantes. Que se lo digan a ElTenedor…
46. El ahorro
No está la cosa para despilfarrar… pero tampoco es plan de ser tacaños con la cesta de la compra. Un poco de cabeza y planificación es suficiente para comer bueno, bonito y barato.
47. Los brindis
Nunca nos cansaremos de levantar nuestra copa por todo aquello que se lo merezca. Y puestos a elegir, si es con un buen vino o cava español, mejor que mejor.
48. El aceite de la vida
Cada día esta maravilla de nuestra gastronomía es más apreciada por todos. Los pequeños productores se esmeran en elaborar ediciones especiales que son todo un éxito. Tal es su auge, que oír hablar de arbequina o picual ha dejado de sonar a chino para la mayoría.
48. La vida D.C.
Es decir, ‘después del Coronavirus’, esa era que está por llegar en la que los bares estarán de bote en bote, los amigos se abrazarán y todo esto será un mal sueño.
50. Tapas
Las de comer, claro. Pero también esta revista: porque vamos a seguir dando guerra muchos años más, zampándonos la vida a bocados. Estáis invitados.